En el pleno del Senado de la República se llevó a cabo la sesión solemne en la que rindieron protesta los nuevos integrantes del Poder Judicial de la Federación, electos en el proceso del pasado 1 de junio. En total, asumieron funciones 881 personas juzgadoras, entre ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, magistrados electorales, magistraturas de circuito y jueces de distrito.
Antes de la toma de protesta, los partidos fijaron postura. Con los ministros ya presentes en el salón, la oposición cuestionó la legitimidad del proceso que los llevó a ocupar el cargo. Los senadores de Movimiento Ciudadano y Acción Nacional insistieron en que la elección del 1 de junio careció de legalidad y fue producto de una reforma judicial aprobada con una mayoría “artificial” en el Congreso.
El senador José Clemente Castañeda Hoeflich, de Movimiento Ciudadano, dijo que lo que el régimen intenta es engañar y aprovecharse del malestar generalizado para capturar políticamente al Poder Judicial, recordando que la reforma fue avalada con una mayoría que no reflejó la voluntad popular expresada en 2024.
Sostuvo que el sistema de justicia le ha fallado a los mexicanos porque nunca ha sido asequible, sólo unos cuantos pueden pagar un abogado y las instituciones encargadas de la impartición de justicia no generan confianza.
Señaló que la reforma no buscó mejorar la investigación de delitos ni atender a las víctimas, sino liquidar la carrera judicial y condenar al desempleo a cientos de jueces y magistrados como si todos fueran corruptos.




Reconoció que quienes asumieron funciones son los menos responsables, pero advirtió que el mecanismo de elección abre la puerta a presiones políticas y económicas, y que el Tribunal de Disciplina podrá sancionar sin derecho de apelación.
“Por encima de los cargos está la Constitución, por encima de los votos están los derechos y por encima de la política está la justicia y la vida de las personas“, expresó.
Ricardo Anaya Cortés, coordinador de los senadores del PAN, retomó el recuerdo de Luis H. Álvarez, quien en 1986 encabezó una huelga de hambre contra el fraude electoral en Chihuahua, y destacó que fue Heberto Castillo, padre de la actual presidenta del Senado, Laura Itzel Castillo Juárez, quien lo convenció de deponerla. Con esa anécdota subrayó la diferencia entre legitimidad de origen y legitimidad de ejercicio: “no tiene legitimidad de origen la autoridad que emana de un proceso fraudulento plagado de irregularidades“.
Enumeró fallas graves: la conformación de comités de evaluación con perfiles inexpertos e incondicionales; la violación a la Constitución al incluir sólo 19 nombres en la tómbola del Tribunal de Disciplina en lugar de 50; y la baja participación ciudadana, que calificó como “una vulgar feria de acordeones“.
Aseguró que no se trata de descalificar a más de 800 jueces y magistrados, pero tampoco de callar y advirtió que “por sus sentencias se les conocerá“, advirtió.
Los señalamientos fueron escuchados directamente por los nueve ministros de la Suprema Corte: Hugo Aguilar Ortiz, Lenia Batres Guadarrama, Yasmín Esquivel Mossa, Loretta Ortiz Ahlf, María Estela Ríos González, Giovanni Azael Figueroa Mejía, Irving Espinosa Betanzo, Arístides Rodrigo Guerrero García y Sara Irene Herrerías Guerra. La ministra Lenia Batres no ocultó su molestia durante los discursos opositores, mientras que la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, también molesta, escuchaba con atención en representación de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Mónica Soto Fregoso, presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y consejeros del Instituto Nacional Electoral quienes también acudieron, escucharon las inconformidades de la oposición.
Desde Morena, la senadora Sasil De León Villard defendió la reforma al afirmar que, por primera vez en la historia, el Poder Judicial fue electo en las urnas y que con ello se terminó con una era de privilegios y de justicia selectiva y sostuvo que el artículo 39 de la Constitución respalda el proceso porque todo poder público dimana del pueblo y aseguró que esta transformación consolida la independencia del Poder Judicial como parte de la Cuarta Transformación.
Concluidos los posicionamientos, se desarrolló la ceremonia de protesta. Por la Suprema Corte rindieron protesta Hugo Aguilar Ortiz, quien asumirá la presidencia por dos años, Lenia Batres Guadarrama, Yasmín Esquivel Mossa, Loretta Ortiz Ahlf, María Estela Ríos González, Giovanni Azael Figueroa Mejía, Irving Espinosa Betanzo, Arístides Rodrigo Guerrero García y Sara Irene Herrerías Guerra. A partir de ayer, la Suprema Corte quedó integrada por nueve integrantes, reduciendo su composición de 11 como estaba establecido anteriormente.




Hugo Aguilar Ortiz, quien fungirá como presidente por un periodo de dos años, fue recibido con gritos de “¡presidente!” y aplausos; en tanto, Arístides Rodrigo Guerrero, quien sufrió un accidente automovilístico la noche del 22 de agosto en la Ciudad de México, ingresó en silla de ruedas con apoyo de un tanque de oxígeno, lo que provocó ovaciones en el recinto.
Por el Tribunal Electoral rindieron protesta Gilberto de G. Bátiz García y Claudia Valle Aguilasocho como integrantes de la Sala Superior, mientras que en las Salas Regionales se integraron 15 nuevas magistraturas.
Hasta el cierre de la edición continuaba la sesión solemne para tomar protesta a los integrantes del Tribunal de Disciplina Judicial quedó conformado por Celia Maya, Eva Verónica de Gyvés Zárate, Indira Isabel García Pérez, Bernardo Bátiz Vázquez y Rufino H. León Tovar.
También se tomó protesta a 464 magistraturas de circuito, distribuidas en los 32 circuitos judiciales del país, y a 386 jueces de distrito, quienes tendrán la responsabilidad de impartir justicia en todo el territorio nacional.
La sesión fue encabezada por la presidenta de la Mesa Directiva, Laura Itzel Castillo Juárez, y contó con la asistencia de 107 de los 128 senadores.
Antes del acto solemne, el pleno aprobó con mayoría calificada el nombramiento de Surit Benerice Romero Domínguez como integrante del Órgano de Administración Judicial, con 80 votos a favor, 18 en contra y 5 abstenciones, tras lo cual rindió protesta de ley.

Foto: Aracely Martínez 


