POR PATRICIA RAMÍREZ
Ante los efectos catastróficos del confinamiento por la pandemia del Covid19, la bancada del PRI en la Cámara de Diputados demandó rescatar al sector, pues este es uno de los que genera mayor riqueza, pero es el que menos apoyo ha recibido durante el actual gobierno federal.
La diputada Laura Barrera Fortoul urgió a crear un plan de apoyo y rescate para este sector y acotó que la medida más eficaz para estimular este mercado es la ampliación de los fines de semana largos, lo que supone un incremento en la captación fiscal derivada del aumento en el consumo interno.
Por ello, la legisladora impulsa la creación de un nuevo día feriado, el primer lunes de octubre de cada año, para conmemorar el 27 de septiembre la consumación de la gesta independista del país, fecha que además coincide con la conmemoración del Día Mundial del Turismo.
Barrera explicó que antes de la pandemia el turismo representaba casi el 9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), lo que obliga a reasignar el presupuesto a los Pueblos Mágicos, el financiamiento público para la promoción de destinos en todo el país y apoyo inmediato a las pequeñas y medianas empresas que ofrecen bienes y servicios a los visitantes nacionales y extranjeros.
Agregó que hasta antes de la crisis sanitaria, la actividad turística generaba 4.2 millones de empleos, sobre todo entre mujeres y jóvenes. Expuso que más del 75 por ciento del consumo turístico está relacionados con los viajes que hacen los mexicanos dentro del territorio nacional, de aquí la importancia de que los Pueblos Mágicos cuenten con el presupuesto necesario.
“En México las afectaciones han sido devastadoras, el saldo de la balanza turística cayó en un 49.3 por ciento, los turistas internacionales disminuyeron 45 puntos porcentuales y los nacionales 55, afectando los ingresos por visitantes internacionales en más del 50 por ciento”, resaltó.
Por ello, la diputada priista planteó redireccionar un porcentaje relevante de los recursos captados por el Derecho de No Residentes, a fin de impulsar la demanda de destinos turísticos en los meses subsecuentes a la crisis, y dirigir en su totalidad el impuesto hotelero a la promoción turística, así como garantizar mayor y mejor presencia pública de estos lugares en medios digitales.
Asimismo, pidió privilegiar la salud de turistas y colaboradores, preservar el empleo de sus trabajadores, además de mantener una política de máxima flexibilidad en las cancelaciones, y así evitar una afectación adicional a sus clientes.




