El ex futbolista colombiano Wilmer Medina reconoció en una estremecedora entrevista que durante su época en activo no llevaba buena relación con el también cafetalero Camilo Vargas a quien pensó en matar a tiros, aún sin importarle que eso le hubiera llevado a prisión. “Aunque vaya a la cárcel, lo pago”, compartió a los micrófonos de la cadena televisiva Caracol.

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El actual cancerbero del conjunto de los Rojinegros del Atlas defendió los colores del Independiente de Santa Fé de la Liga colombiana de balompié de 2007 a 2014, año en el que coincidió con su compatriota Wilder Medina, quien confesó que tuvo problemas por no tolerar la personalidad de Vargas tras perder la Final contra Atlético Nacional.

“No lo llevaba muy bien porque no saludaba y ese día que perdimos la final yo entré llorando y llegó él (Camilo Vargas) diciendo: ‘no, tranquilos, perdimos la final, no pasa nada’ y como que se me vino todo y me fui a darle puños. . Yo dije: ‘le meto un tiro a ese muchacho y acabo el futbol y, así me toque irme para la cárcel, yo lo pago’”.

Afortunadamente, una llamada del presidente del equipo antes de llegar al entrenamiento evitó lo que pudo haber sido una tragedia. “Don César me llama y me dice: ‘usted ya llegó tarde al entrenamiento, usted está tomado, vaya, descanse, yo voy a presentar su carta de renuncia’ (…) ¿Qué hubiera pasado si yo hubiera llegado al entrenamiento? Yo con esa rabia que llevaba, con tragos encima, yo lo hubiera cometido, hubiera dejado a la selección Colombia sin uno de los mejores arqueros en este momento, que es el titular”, reconoció Medina.

La historia de vida de Medina fue trágica, pues sufrió mucho por la muerte de su padre en septiembre de 1997, cuando Wilder apenas tenía 16 años de edad.

Pese a la pérdida y a que comenzó a involucrarse en el mundo de las drogas y el alcohol, en 2002 logró firmar con el Atlético Huila, club en el que debutó como profesional y marcó sus tres primeros goles, pero la sombra de las adicciones lo perseguían y que más tarde le cobrarían factura.

Vistió también los colores del Deportes Tolima, pero no estuvo a la altura de lo que se esperaba de él, por lo que abandonó la institución por la puerta de atrás y luego recaló en Independiente de Santa Fe, también jugó en Ecuador y Bolivia, pero terminó su carrera profesional en Colombia, en Fortaleza, en 2017.

“Uno al mundo viene es a cumplir propósitos y él (Dios) dejó que yo fuera goleador y la rompiera en el futbol, pero el más grande propósito lo tengo hoy, con estos jóvenes (a los que ayuda)”, enfatizó Wilder Medina puntualizando que “voy a morir sobrio, eso sí téngalo claro, pa’ atrás ni pa’ coger impulso, porque esta es la vida que me merezco”, compartió también a través de la televisión colombiana.