PILAR MANSILLA
Foto: Andrea Murcia Monsivais / Cuartoscuro.com
Los padres de 38 de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa se retiraron de la mesa de diálogo con la Comisión Presidencial para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa (COVAJ), ya que, denunciaron el gobierno federal los quiere dividir con el propósito de no llegar a la verdad de los hechos y encontrar a los jóvenes.
En conferencia de prensa, una vez que se levantaron del encuentro, acusaron a los cinco padres que se quedaron en el encuentro y al gobierno federal de haber incumplido con la promesa que hizo el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador en campaña, en el sentido de que se llegaría a la verdad de los hechos y ahora buscan ayudar al ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca y que está, presuntamente involucrado con la desaparición de los estudiantes.
Las acusaciones en contra del gobierno federal fueron más allá al afirmar que estaban, el gobierno federal y los cinco padres que decidieron, aseguraron, abandonar la lucha a cambio de prebendas económicas, ya que no cuentan con suficientes recursos para gozar de una vida digna.
Los 38 padres, así como su abogado y director del Centro Agustín Prodh, Vidulfo Rosales y Santiago Aguirre Espinosa, respectivamente, coincidieron en señalar que el presidente Andrés Manuel López Obrador actúa igual que su antecesor Enrique Peña Nieto por intentar separar a los padres y mantenerse en lo que se llamó “la verdad histórica”.
Al explicar que los cinco padres que decidieron anteponer sus intereses personales en lugar de privilegiar la búsqueda de sus hijos fueron “expulsados” de su lucha y grupo, situación que tiene clara el gobierno federal, así como el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Félix Arturo Medina Padilla, por lo que ya habían solicitado que se mantuvieran las mesas con ellos de manera independiente.
Sin embargo, acusaron a los funcionarios federales de haber intentado confrontarlos, incluso advirtieron que tampoco van a ir a buscar a los archivos que abrió el gobierno federal, a través de la Secretaría de la Defensa Nacional para que revisen todos los expedientes y que ellos sean los responsables de encontrar los 800 folios militares y diversos documentos que podrían indicar en dónde se encuentran por lo menos 17 de los 43 estudiantes que fueron trasladados de un lugar a otro, donde también se encuentran las transcripciones de las llamadas telefónicas que se hicieron al momento de investigar el paradero de los jóvenes.
Mientras se desarrollaba la conferencia de prensa, el gobierno federal y pese a que los padres se levantaron de la mesa emitió un comunicado en donde se deslinda de la decisión de los padres por haberse retirado e indicó que continuaron con el diálogo “con aquellos que decidieron permanecer para recibir el último informe de la COVAJ.
