El incendio que se observó este miércoles en un vagón del Metro, en la estación Indios Verdes de la Línea 3, apenas reabierta hace poco más de una semana, se debió por la lluvia y la acumulación de basura en las vías, “ya que cualquier objeto al hacer contacto con la barra guía provoca un corto circuito”, aseveró la directora del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Florencia Serranía Soto.

“Este incidente fue derivado de una causa que se juntó entre lluvia y un objeto extraño, estamos revisando lo que sucedió. Esto nos ha sucedido en un par de veces con globos metálicos en esta temporada y nos ha sucedido con latas de cerveza que caen a la vía, que al hacer contacto con la barra guía entonces hacen un corto circuito y sale un flamazo, y ese flamazo es por la tensión que manejamos que son 740 volts”, explicó.

No obstante, en videoconferencia de prensa, comentó que el  tren cuyo neumático se quemó ayer y provocó el desalojo del tren en la estación Indios Verdes, “ya se encuentra en revisión”.

La funcionaria aseguró que el tren tiene buenas condiciones para operar, sólo que actualmente se encuentra en la cámara de pintura.

“Este fue un tren que fue desalojado y retirado de circulación, en este momento ya está en revisión. Está operable desde ayer –miércoles-, salió por sus propios medios –de la estación-; ahora está en la cámara de pintura para devolverlo a la operación y revisión de todos sus componentes para saber que está en perfectas condiciones para el servicio”, dijo.

De igual forma, señaló que el incidente fue atendido de manera inmediata por personal del Metro y que para poder sofocar el fuego se realizaron 10 disparos de dos extintores. “Nuestra gente que está preparada para atender estos incidentes, actuó inmediatamente; fue sofocado con dos extintores, fueron aproximadamente 10 disparos de cada extintor. Fue muy aparatoso pero nuestra gente está muy preparada para este tipo de protocolos”, argumentó.

Por otro lado, Serranía Soto reiteró que para garantizar el restablecimiento del servicio de las líneas 1, 2 y 3, que dejaron de operar tras el incendio del pasado 9 de enero, ello depende de tres elementos, esto es, pilotaje automático, Telemetría Metro y comunicación tetra.

Reiteró que el pilotaje automático impide un acercamiento menor a 200 metros entre un tren y otro; en tanto que Telemetría Metro es un desarrollo tecnológico desarrollado por ingenieros y técnicos del STC y comunicación Tetra es un estándar internacional ferroviario que permite la comunicación de centro de control a tren y de tren a centro de control.

Recordó que el sistema de Telemetría permite adentrar a la caja negra del tren y saber en tiempo real las condiciones de seguridad del tren, entre ellas, saber si son conducidos en pilotaje automático, estado de las puertas, tipo de tracción y funcionamiento de motores.

No dejó de mencionar que los trenes tienen varios sistemas de conducción dependiendo de la maniobra que se está haciendo, y normalmente se regula en PA (Pilotaje Automático); CMC (Conducción Manual Controlada), donde el conductor tiene el control sobre el tren sin perder los elementos de seguridad.

“Esto lo que nos da es una doble seguridad de saber que los trenes tienen el modo de conducción más seguro que existe, el tren tiene varios sistemas de conducción dependiendo de la maniobra que se está haciendo, pero en conducción con usuarios tenemos siempre que regular que sea en PA o en CMR que es la segunda que sigue manteniendo su protección de pilotaje automático, cuando llueve tenemos una conducción distinta en una maniobra como la de ayer”, comentó.

De esta manera permite en caso de que algún tren esté fallando, sea removido para su revisión e ingresar otro.

Esos otros tipos de Conducción Manual se toman únicamente fuera de servicio comercial, para averías y maniobras en talleres de material rodante, como el CMR (Conducción Manual  Restringida),  es para franquear una señal y no más de 35 kilómetros por hora; CML que es Conducción Manual Limitada y no se puede avanzar a más de 60 kilómetros por hora.

Así como CML2 (Conducción Libre Tracción 2), que es el modo menos utilizado de conducción y solo se utiliza con autorización del regulador del PCC (Puesto Central de Control), que prácticamente se utiliza sólo para maniobras de socorro tren a tren.