Martín Avilés / Ovaciones
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Carlos Alcaraz caminó por las alfombras de Palacio Real de El Pardo a su paso entre las pistas duras y la mítica tierra batida que tantas glorias le ha dado al tenis español a través de la raqueta sagrada de Rafael Nadal. En plena transición de superficie en la temporada, pausó por un momento para recibir el Premio Rey Felipe al mejor deportista de 2022, un galardón poco más que merecido.
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Y es que se trató del año de su irrupción el deporte blanco, como candidato serio a convertirse en leyenda del circuito, al erigirse como el número uno más joven del ranking ATP. Además, en ese lapso alzó su primer trofeo major en el US Open, los Masters de Madrid y Miami; así como los cetros de Godó y Río.
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Tras recibir la condecoración, Carlitos se dio tiempo para hablar de su futuro, donde vislumbra un 2024 exhaustivo, al tener a la vuelta de la esquina la temporada de arcilla donde desde mañana estará en Montecarlo para prepararse en este tipo de pistas lentas donde ya ha tenido éxito en antaño y donde Nadal recién anunció su baja para dejar en putos suspensivos —nuevamente— el devenir de su carrera, mientras Alcaraz lo espera paciente en busca de poder jugar juntos en los dobles de los Juegos Olímpicos de París 2024.
“Sería un sueño jugar en París con Rafa, porque siempre ha sido mi ídolo. No habría mejor manera de debutar en unos Juegos Olímpicos que jugando un dobles con él. A ver cómo llegamos los dos, porque todo puede pasar. Me ha llegado (información) que también le hace ilusión y yo no me escondo”, dijo el murciano, quien hace poco pudo compartir con el campeón de 22 Grand Slams durante una exhibición en Las Vegas.
Mientras tanto, el aún juvenil de 20 años de edad se enfoca en retomar su más óptimo nivel ya mismo en Montecarlo, toda vez que su buen amigo y principal rival generacional Jannik Sinner tiene tomado al circuito por los cuernos, al tiempo que Novak Djokovic sigue siendo tan peligroso como cuando se encargó de ser el némesis favorito del tenis en los tiempos de Nadal y Roger Federer.
Top 4 seeds leading the way into the quarterfinals. 👊 pic.twitter.com/DpmO7Yh17S
— US Open Tennis (@usopen) March 27, 2024
“No soy favorito. Ojalá que Sinner me presione para poder dar mi 100 por 100 y que dentro de 10 años hablar de una rivalidad histórica. Llegar a las cifras de Djokovic, Nadal o Federer es impensable. Ha sido algo fuera de lo normal. Mi objetivo es alcanzarlos, porque hay que soñar a lo grande. Pero es algo lejano”, reconoció Carlitos, quien ve con buenos ojos poder jugar en el mítico Santiago Bernabéu.
“Sería increíble jugar en el Bernabéu una exhibición, y si es con Nadal, más. Sería muy bonito para toda España”, remachó.
