Ana Gabriela Guevara ha bajado el telón de su función. La directora de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) se encuentra en la recta final de la carrera más exhaustiva de su vida después de las pistas, al haber sido marcada por claroscuros derivados del incesante golpeteo golpeteo mediático hacia su gestión, así como por una tormenta de acusaciones por irregularidades que a pesar de todo no pudieron truncar su administración. Y con solo unos cuántos días de vigencia, se ha despedido del cargo.

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Habrá sido 2 mil 130 días al frente de este organismo administrador del deporte a nivel nacional que encuentra sus orígenes en 1998. Casi desde el primer día, Ana Guevara fue puesta bajo la lupa al estar sentada en una silla caliente donde los vaivenes entre las federaciones y su opacidad, suelen provocar lagunas legales que anteriormente, se les solía sacar provecho. Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador siempre la respaldó.

“No me sentí intocable. Hoy en este momento no existe ninguna denuncia hacia mi persona. No hay inmunidad ni sobreprotección; si alguien podía hacer una denuncia era el propio presidente. No era inmunidad porque no se trata de encubrir nada, me quedo intensamente tranquila de que nada de lo que se ha dicho o escrito es cierto y me preocupa la gente que lo ha creído”, dijo la sonorense en el marco de la Entrega de Estímulos a Deportistas por Resultados en Campeonatos Mundiales, Juegos Olímpicos y Paralímpicos París 2024.

En 2019, la exvelocista de 47 años fue señalada por ocupar un cargo público como directora sin tener título profesional, y poco después, la Secretaría de la Función Pública (SFP) reveló una supuesta desviación de recursos del Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar), del que presuntamente comprobaba sus gastos mediante empresas que emitían facturas falsas. Desde entonces, han sido múltiples acusaciones de las que Guevara Espinoza asegura, no hay una sola investigación vigente en su contra.

“Hay instituciones y hay autoridades responsables de evaluar y de juzgar cuando se cometen actos, aquellos que han cometido actos. En el caso nuestro y en el caso personal, hoy, en este momento, no existe ninguna carpeta ni tampoco ninguna denuncia hacia mi persona que acredite todos los dichos. En el primer periodo de lo que fue la administración, cuando deshabilitaron a un grupo de colaboradores de Conade , al final de cuentas el tribunal del administrativo no encontró elementos que pudieran configurar todos los dichos que a la fecha siguen sosteniendo y que carecen de validez y carecen de sustentabilidad”, aseguró la nacida en Nogales, Sonora.

Pero más allá de las acusaciones en su contra en temas presupuestales, el mayor reclamo por parte de los atletas fue su falta de empatía. Por ejemplo, en 2023, después de que el equipo de natación artística se quejara por falta de apoyos económicos, en una entrevista con W Radio, Ana Gabriela dijo que “por mí que vendan calzones, trajes de baño, Avon o Tupperware, pero ellas y sus entrenadoras son deudoras. Les hemos dado 40 millones de pesos y no los han justificado”.

Una frase que quedó marcó su administración, pues aunque la funcionaria pública solo pedía que las atletas mostraran sus facturas de gastos, lo cierto es que la opinión pública se quedó con solo aquellas fuertes palabras que trascendieron más allá de la controversia. Pero aún así, negó que fuese un error de comunicación de su parte.

“El punto medular de estar al frente de la institución no se torna en sentimentalismos. Mi cercanía, mi afecto y mi empatía hacia los deportistas radican en otro sentido. No una disciplina debe cambiar la percepción. No hay nada qué arrepentirse. No estoy esperando una calificación. Tengo la certeza y la plena satisfacción de haber logrado y de haber hecho, en conjunto con todo el equipo, que saliéramos a buen puerto. Los berrinches no se pueden cotejar. El respeto a las reglas, protocolos y normas es algo irrestricto. Una disciplina no puede catalogar a todo el deporte nacional. Aquí hay más deportes que pueden asegurar que siempre hubo en la Conade la disponibilidad de buscar el cómo sí solucionar los problemas que varios aquejaban”, comentó.

Hace unos días, la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, nombró como sustituto de Guevara a Rommel Pacheco, un exclavadista que tendrá la encomienda de solucionar esa deuda pendiente que dejó la medallista de plata en Atenas 2004 con los deportes acuáticos, mismos que siguen en pugna por el escándalo de Kiril Todorov y la creación del Comité Estabilizador impulsado por el Comité Olímpico Mexicano (COM), mismo que carece de un carácter legal. Pero a pesar de lo tormentosa que fue su gestión por todos los problemas enraizados en el deporte nacional, declinó dar un consejo al exatleta olímpico.

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“No hay nada que explicarle a la nueva administración que no esté asentado en los documentos que dejaremos. La opinión que pueda tener el personal del Comité Olímpico Mexicano (presidido por Maryjose Alcalá), a mí solo me indica que la ignorancia es muy valiente. Todo se hizo en apego a los aparatos legales y le tocará al nuevo equipo de trabajo el seguir bajo la misma lógica”, afirmó y rechazó tajantemente el haberse postulado con Sheinbaum para continuar en el cargo.

“Este puesto está designado por seis años y ahora se transita a la siguiente administración. La decisión de la presidenta electa, que será presidenta en unos días, es clara, nunca de mi voz salió un ‘yo quiero’. Tengo que ser respetuosa, porque todos los puestos de la administración pública son prestados, se respeta y se hace uso del profesionalismo. Esto es prestado y no de permanencia voluntaria”, agregó.

Entre aplausos de los presentes, Ana Gabriela Guevara Espinoza se despidió públicamente de su cargo, mismo que deberá dejar tan pronto como el próximo lunes 30 de septiembre, cuando entregue la oficina al expanista Pacheco Marrufo, y dejó en claro que no piensa aún hacia dónde enfocar su carrera.

“No me hago expectativas para no sufrir, seré paciente. Tomaré la decisión de lo que sigue en los siguientes días. Mientras tanto, tengo la responsabilidad de concluir esta administración y entregar debidamente la institución, con números negros y sin ninguna alarma de ninguna índole. Esta administración está por terminar y solamente me quedaría decirles gracias, porque los deportistas fueron el motor para echar a andar esta máquina, en la que cada uno puso su granito de arena. Estamos ante una sinergia de competitividad a la que nos enfrentamos todos los días, trabajando para que los deportistas lleguen en las mejores condiciones”, sentenció.