POR PATRICIA RAMÍREZ
Ante crisis como la Covid19, la economía social y solidaria se ha convertido en una alternativa para atenuar las consecuencias negativas en la sociedad, aseguró la diputada Magdalena Núñez Monreal.
Consideró que un nuevo esquema para la construcción de una transición justa hacia nuevos modelos económicos que protejan e incluyan a las personas más pobres y vulnerables, permitirá contar con políticas integrales que apoyen a las empresas de la economía social y solidaria.
Tras una reunión de trabajo con la Dra. Ana Bárbara Mungaray-Moctezuma, titular de la unidad de Desarrollo Productivo de la secretaría de Economía, la legisladora del PT explicó que la pandemia por Covid19 dejó de manifiesto la fragilidad de la economía, a la vez que ha profundizado las desigualdades y la necesidad de resistencia, innovación y cooperación.
Ante crisis como esta, la economía social y solidaria se ha convertido en una alternativa para atenuar las consecuencias negativas en la sociedad, ya que ha actuado como un escudo para enfrentar, mitigar y transformar las situaciones de pobreza y marginación que afectan a millones de personas. Así como ser un instrumento de generación de trabajo, empleo e ingresos; y contribuir de esta forma al desarrollo local, sostenible e inclusivo.
Prueba de lo anterior, la legisladora puso de ejemplo la aparición de un nuevo nicho de mercado enfocado en las compras desde plataformas digitales para el abastecimiento de víveres, un aporte que dejó la economía social y solidaria durante los meses de confinamiento a raíz del Covid19.
Asimismo, la diputada petista hizo votos a favor de fortalecer la Ley General de Cooperativas, de manera específica, las de ahorro y préstamo; por lo que reafirmó el compromiso del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo en la defensa de una agenda social y política para una economía interna al servicio de las mexicanas y mexicanos, “basada en una relación respetuosa con la naturaleza, que promueva una distribución más justa y equitativa de la riqueza, que genera el trabajo, así como las relaciones sociales de producción y sus sistemas democráticos, plurales e incluyentes de convivencia social y política”, concluyó.
