Carta de México al Congreso de EU rechaza la propuesta de aplicar un impuesto a las remesas

Esta iniciativa de gravar los envíos de dinero de los paisanos a sus familias “no tiene razón de ser y no estamos de acuerdo con ella”: Cancillería


Juan Ramón de la Fuente
Foto: Cuartooscuro

Durante su participación en la conferencia matutina en Palacio Nacional, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, se refirió a la propuesta de aplicar un impuesto de 5% a los envíos de dinero que los trabajadores mexicanos hacen desde Estados Unidos a sus familias en México.

Al respecto, el canciller informó que, el pasado 13 de mayo, el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum envió una carta al Congreso de la Unión Americana, en la que se desglosaron los argumentos en contra de ese gravamen.

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Asimismo, explicó el procedimiento que se sigue en la Cámara de Representantes de EU en relación con la iniciativa del Partido Republicano: “El proyecto de presupuesto de EU se revisa ahora en la Cámara de Representantes y su Comité de Medios y Procedimientos se encarga de las cuestiones recaudatorias; es ahí donde la propuesta de incrementar la recaudación en su país. Y, entre sus disposiciones, aparece este impuesto del 5% a remesas en el extranjero en general, es decir, no hay una dedicatoria a ciertos países”.

Planteada la propuesta el 12 de mayo, “de inmediato, la presidenta Sheinbaum nos instruyó para ofrecer una primera respuesta de México, y por ello se elaboró una carta dirigida a los representantes del Comité de Medios y Procedimientos el 13 de mayo”. Entre esos argumentos destacan que los trabajadores mexicanos “son, en primer lugar, personas que ya pagaron impuestos, que contribuyen de manera muy importante a la economía estadounidense, que el monto de las remesas apenas representa el 18% de todos los ingresos que generan nuestras y nuestros paisanos, y que lo demás se queda en Estados Unidos”.

En caso de que esa propuesta se apruebe por la Cámara de Representantes, detalló De la Fuente, “entonces se turnaría al Senado, que tendría que hacer el análisis correspondiente y, dependiendo de ese dictamen, el proyecto regresa o no, con las modificaciones —si es que las hubiese— a la Cámara de Representantes”. Por el momento, esa aprobación en la primera cámara se lleva a cabo este viernes.

Además de la carta enviada al Congreso de EU, agregó el canciller, “el embajador de México en Washington, Esteban Moctezuma, también en atención a las instrucciones de la presidenta Sheinbaum, se ha estado reuniendo por separado con diversos grupos de representantes, esgrimiendo la posición de México, las razones que aquí les hemos compartido, por qué no estamos de acuerdo”.

En ese sentido, prometió: “Vamos a dar la mejor defensa que se pueda, en términos políticos, en términos legales, porque no nos parece nada bien que esta medida, con fines recaudatorios de Estados Unidos, afecte a una porción muy importante y muy sensible de nuestros connacionales“.

Asimismo, afirmó que el tema es prioritario, tanto para el poder Ejecutivo como para el Legislativo de México: “Estaremos dándole seguimiento puntual. (Este jueves) ya también le hicimos llegar, por los conductos oficiales, los planteamientos que nos hizo llegar la Comisión Permanente del Congreso de la Unión a través de la Secretaría de Gobernación, y ya se han procesado (esos argumentos) en los términos institucionales. Seguiremos tomando las acciones que nos vaya indicando la presidenta Sheinbaum sobre el particular”.

Por su parte, Roberto Velasco, jefe de unidad para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, explicó que este impuesto no va dirigido sólo a mexicanos, sino a cualquier persona que no sea ciudadana de Estados Unidos, pero que viva y trabaje ahí y haga uso de los servicios de envío: “Eso es muy delicado, porque quiere decir que, incluso una persona que está en EU con una visa de trabajo o con una tarjeta de residencia permanente estaría sujeta a este gravamen y eso es discriminatorio“.