Foto: Cuartoscuro.com La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo mostró su descontento porque la iniciativa de Ley contra el nepotismo que envió al Congreso de la Unión para que tuviera vigencia a partir de 2027, se aprobó por sus compañeros morenistas en el Senado para que ésta se aplique a partir del año 2030, finalmente, confió que será la población la que sancione a un partido o alianza, en las próximas elecciones, si se pone a un familiar.
“Yo la mandé al 2027, y mi posición sigue siendo pues que debería aprobarse para el 2027. Entiendo que en el acuerdo para poder tener la mayoría de los partidos que son parte de la alianza del movimiento, acordaron que fuera hasta el 2030. Entonces, ahí es una decisión de los senadores y los diputados. Lo que me importe a mí, yo creo, no a la Presidenta, lo que le importa a todas y todos los mexicanos es que no haya nepotismo en estos procesos electorales”.
La mandataria del país precisó que “lo más importante es que queda en la Constitución, no es al 2027, es al 2030”, pero además, señaló, tiene que ser aprobada por la mayoría de los Congresos estatales.
“Pero queda en la Constitución que a partir de 2030 ya no hay reelección y no puede haber familiares que hereden los cargos. Y aquel que lo haga en 2027 pues se va a ver muy mal”.
Sin la sonrisa que la caracteriza de satisfacción, dijo que los partidos que acordaron aprobar la reforma plantearon que ello fuera al 2030, “son los acuerdos que se toman en las Cámaras, desde mi punto de vista…”.
Confió que en Morena, en 2027, “esperemos que al menos el partido político del que yo provengo, no ponga ningún familiar de uno y otro cargo. Creo que además eso está en los estatutos de Morena. Espero que se respete para el 2027”.
Recordó que de esta forma, no podrán haber familiares que aspiren a una elección, si en el periodo inmediato hubo alguien de su familia con un cargo, y en el caso de reelección desde el 2030, tampoco podrán hacerlo ni presidentes municipales, diputados, senadores ni diputados locales.
Cuestionada sobre el hecho de que se pospuso la aplicación de esta ley, luego de que un senador dijo que quiere que su esposa contienda por una gubernatura, Sheinbaum Pardo señaló que no emitirá ninguna “observación para recomponer” la ley contra el nepotismo.
Con el rostro serio, explicó: “lo que ocurre para los senadores de cualquier partido político, de los diputados, nosotros tenemos una, bueno hay alianza del partido al que pertenezco, de tres partidos políticos.
Lo que buscan es que se apruebe una reforma; si no la aprueban, entonces buscan un esquema en donde pueda quedar aprobada. No es un asunto de, pues, si hay partidos que deciden que no la van a aprobar, a menos que diga 2030, pues la otra es que no se hubiera aprobado. Finalmente, los senadores de Morena dicen: bueno, pues vámonos al 2030 para que quede en la Constitución. No sé si la razón de los otros partidos políticos tenga que ver con el gobernador de San Luis Potosí.
“Lo que es cierto, es que no creo que el pueblo ni de San Luis Potosí, ni de ningún estado de la República, ni de la Ciudad de México, le guste que haya, que se deje como candidato a un familiar.
Si presentamos la propuesta fue justamente por eso. Si alguien pretende dejar a un familiar o que sea un familiar que sea el candidato o candidata, lo va a ver muy mal la gente, ni siquiera el movimiento al que pertenecemos o la Presidenta de la República, no creo que sea una buena idea.
Entonces, es lo que se pudo aprobar, la política también es eso. Ahora qué espera la Presidenta, o todas y todos los mexicanos que en el 2027 no haya familiares que se presenten como candidatos, y si se llegan a presentar familiares, no creo que les vaya muy bien”.
Con todo la explicación anterior, la mandataria del país afirmó que Morena no cedió a presiones de otros partidos, tras aplazar la vigencia de dicha ley, de 2027 a 2030, sino que ello fue un acuerdo, “será el pueblo el que finalmente sancione si se pone a un familiar”.
Más que decirse conforme con este resultado, “pues es lo que se logró en el Senado, y me parece bien porque finalmente queda en la Constitución”.
