José Andrés Díaz / Ovaciones
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Cruz Azul fue muy ordenado, sobrio y certero; aprovechó que unos impetuosos Pumas se pusieron nerviosos y cometieron errores, para atestarle dos goles y derrotarlo 0-2 en el Estadio Olímpico Universitario, con lo que encaminaron de gran forma el pase a semifinales, aunque deben cerrar la obra el domingo en el Ciudad de los Deportes.
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Si bien Julio González se equivocó en el primer gol de la visita, el guardameta felino salvó la goleada en contra de su equipo, con varias atajadas clave para que Pumas al menos tenga algo de vida para el juego de Vuelta.
Una serie que a priori tenía el pronóstico de ser muy cerrada en ambos juegos tanto en la Ida como en la Vuelta, porque más allá de que los celestes terminaron segundos en la fase regular y los felinos entraron séptimos por el Play-In, en la Liguilla todo comienza de nuevo y las series son muy niveladas.
Así lo demostraron los primeros 20 minutos del duelo en el Estadio Olímpico Universitario, con unos Pumas obligados a ir por la victoria porque tienen que ganar en el global.
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Mientras tanto, el Cruz Azul de Martín Anselmi mostró orden, mucha sobriedad y priorizó siempre estar bien parado atrás; para eso, le sirvió mucho a los celestes que Gonzalo Piovi se recuperara a tiempo y saliera como titular.
También intentar sorprender al ataque con latigazos buscando a Uriel Antuna y su característico vértigo o a Carlos Rotondi con esa potencia que lo identifica cada vez que está en el terreno de juego.
Tras 20 minutos de dominio alterno de la pelota, las ocasiones de peligro comenzaron a darse; Pumas tuvo una clara pero nadie se atrevió a tirar dentro del área, mientras que Rotondi con una barrida casi en mediocampo, sacó un disparo muy extraño que casi toma mal parado a Julio González, quien alcanzó a reaccionar a tiempo.
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Sin embargo, lo bien que lo hizo en esa jugada, lo echó a perder en el siguiente ataque celeste. Al minuto 26 y tras un centro que vino desde la izquierda, el arquero auriazul lo midió muy mal y el balón lo techó.
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Dentro del área, Rodrigo Huescas estuvo muy atento y le retrasó la pelota al Capitán Ignacio Rivero, quien sacó un riflazo con portería abierta para en su juego 150 con Cruz Azul marcar el 0-1 en la Ida. El gol fue de Nacho pero el error fue de Julio y si el arquero universitario quiere un lugar en la Selección Mexicana, este tipo de errores le restan muchos bonos de cara a la Copa América, más allá de que por él fue que la Universidad no acabara goleada.
El gol en contra, por supuesto que cimbró al Olímpico y al pueblo auriazul que abarrotó su casa para apoyar al equipo de sus amores, mientras que los celestes también tuvieron buen apoyo y celebraron con todo un gol que los acomodaba muy bien en la serie y de cara a la Vuelta el domingo.
Abajo en el marcador, la UNAM poco a poco se sacudió el gol recibido y reaccionó muy bien ante un Cruz Azul que siguió en su misma tónica: aguantar, estar bien parado y tocar bien la pelota.
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Por poco al 33′, el Capitán Rivero se va expulsado por una falta a Adrián Aldrete que el árbitro Luis Enrique Santander consideró de amarilla, pero el VAR lo llamó para que la checara de nuevo; sin embargo, el silbante no cambió su decisión, con lo que quedó ahí la polémica de que bien pudo ser marcada como roja, toda vez que el uruguayo le dobla el tobillo al defensa felino.
Después de esa situación, Pumas elevó su nivel de manera considerable y se convirtió en un vendabal sobre unos cementeros que sí aguantaron pero poco a poco con más problemas.
Al 42′, el Chino Huerta sacó un riflazo tras cobro de tiro libre hecho por Leo Suárez, pero el arquero Kevin Mier lo contuvo de gran forma; dos minutos después, un cabezazo de Ulises Rivas pasó apenas por un costado del poste, con lo que el grito de gol se ahogó en la casa felina.
El silbatazo del mediotiempo salvó a Cruz Azul del empate, porque Pumas tocaba la puerta una y otra y otra vez en los últimos minutos del primer tiempo, sin que hasta ese momento se le abriera.
Esa pausa de 15 minutos le sirvió muchísimo a la visita y por el contrario apagó al local, porque el ritmo que había mostrado en los últimos minutos de la parte inicial, no lo pudo replicar cuando comenzó la complementaria.
Por el contrario, Cruz Azul encontró el segundo al 57′, en una acción en la que Lorenzo Faravelli sacó un disparo raso desde fuera del área y José Rivas se la desvío a Julio Gonzàlez, para que el arquero felino no pudiera hacer nada.
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Un auténtico mazazo el que recibió Pumas con esa anotación, porque si bien el equipo felino no dejó de mostrar ímpetu al ataque, sus intentos siempre fueron fallidos.
Al técnico universitario, Gustavo Lema, se le ocurrió amontonar gente en el ataque y metió tanto a Eduardo Salvio como a Guillermo Martínez, para acompañar a César Huerta, Piero Quispe, Leo Suárez y Rogelio Funes Mori, pero la sensación de que los auriazules al menos descontarían nunca fue tan fuerte como sí la de que Cruz Azul estaba por marcar el tercero.
Sobre todo con dos ocasiones que tuvo claras el Capitán Rivero y una más de Uriel Antuna; en dos jugadas, una de Nacho y otra del volante celeste, fue fundamental Julio González para evitar que el marcador se convirtiera en goleada y muy probablemente la eliminación desde ya para la UNAM.
Con Pumas entregado al ataque en busca de rescatar lo que fuera, Cruz Azul adoptó una postura de contragolpeador como en el boxeo, en busca de colocar algún golpe más para terminar de noquear a los auriazules que fueron y fueron pero nunca encontraron al menos un gol que hubiera sido merecido para su causa.
Todavía en el tiempo agregado, otra vez Julio González salvó a Pumas, porque Ángel Sepúlveda tuvo una clarísima en el área chica, pero el arquero felino le tapó muy bien.
De tal manera, los celestes de Anselmi se fueron de CU con dos goles de ventaja y obliga a Pumas a ganarle por 0-3 en el Estadio Ciudad de los Deportes el domingo, siempre y cuando los cementeros no anoten otro gol.
Mientras que la UNAM intentará una vez más hacer la épica ante este equipo en una eliminatoria de Liguilla, como aquella semifinal en el Guard1anes 2020, en la que ganó en la Vuelta 4-0 y eliminó de manera increíble a los azules.
