El encuentro entre Chivas y Cruz Azul, ambos cuadros urgidos por sumar de a tres en sus aspiraciones de superar la fase regular no decepcionó. Con el estadio Jalisco prácticamente lleno y en su mayoría pintado de rojiblanco, aunque no faltaron los valientes con jersey celeste, el duelo correspondiente a la cabalística Jornada 13 se saldó con marcador de Guadalajara 0-1 Cruz Azul.

Esta victoria coloca a la Máquina Celeste con 25 puntos y aunque ahora mismo están en zona de clasificación, quieren afianzarse para no pasar sustos más adelante.

El primer tiempo fue trepidante. Ambos conjuntos saltaron al terreno de juego a dar pelea, sin dar ni pedir cuartel.

Al minuto 7, el cuadro visitante generó una aproximación que obligó a la zaga local a aplicarse a fondo para rechazar el disparo de Ángel Sepúlveda.

Guadalajara le ‘devolvió la cortesía’ a la Máquina, cuando Cade Cowell habilitó oportunamente a Fernando Beltrán, quien tiró del gatillo de pierna derecha y el balón salió apenas desviado de la portería.

Poco a poco, el conjunto tapatío se acentó en el terreno de juego y echando para atrás a los capitalinos.

Al minuto 14, Víctor Guzmán envió centro al área, en la que ya esperaba Luis Romo, quien cabeceó y obligó al portero cementero a aplicarse con decisión.

El Rebaño Sagrado continuó con el ataque al frente, en tanto la Máquina se replegaba. La afición tapatía en el Jalisco intuía que tarde que temprano llegaría el primer gol de Guadalajara.

Y así parecía, porque Guadalajara no cesó en su empeño de mover las redes.

Una de las primeras opciones claras de gol, la tuvo Javier Hernández ‘Chicharito’, quien hizo el gasto físico para aprovechar un balón filtrado de Cade Cowell.

Hernández encaró al portero en el que estrelló el balón. Airadamente, Javier se quejaba de un empujón de zaga cementera, pero el árbitro no le hizo caso.

Pocos minutos después, Hernández tuvo otra gran opción. La segunda más clara hasta ese momento. Cade lo vio solo y le envió el balón. El veterano ariete mexicano le pegó con la parte externa del zapato,pero de nueva cuenta el cancerbero de Cruz Azul evitó la anotación.

Los aficionados tapatíos no dejaban de cantar y apoyar al Rebaño Sagrado. Parecía que por fin llegaba el gol, pero Luis Romo estrelló el balón en el poste.

El árbitro agregó cuatro minutos de tiempo de compensación en los que se mantuvo la tendencia de Chivas al frente.

Pero de repente, en un descuido infantil, al minuto 45+2, la defensa del Rebaño dejó solo sin marca al peligroso Ignacio Rivero, a quien vio en inmejorable posición Luka Romero, quien no lo pensó dos veces para ponerle un pase certero.

Rivero se acomodó, surcó los aires y apenas desvió la trayectoria de la pelota para ponerla pegada al poste derecho. El portero de Chivas voló, incluso rozó la de gajos, que rebotó en el poste… y se incrustó en el fondo de la portería.

Guadalajara dominó gran parte del primer tiempo, pero Cruz Azul la metió. Y así, con la ventaja concluyó la primera mitad.

Para la parte complementaria, el conjunto cementero salió descaradamente a cuidar el marcador. Con un planteamiento de 5-4-1 intentaron jugar al contra golpe.

Chivas llegó varias ocasiones a la meta cementera, pero en la definición no anduvieron certeros. Fue en el tiempo de compensación, cuando estuvieron más cerca de empatar el partido. Sin embargo, Cade Cowell Hugo Camberos las dejaron escapar.

Valioso triunfo de Cruz Azul, que aún sin hacer un futbol espectacular, hizo lo suficiente para sumar de a tres.

Pésima, la cacha

Poderoso caballero es don Dinero. En un cambio de último momento, avalado por la Liga MX, el Rebaño Sagrado afrontó el partido de anoche contra Cruz Azul en la cancha del Estadio Jalisco, y no en el Akron a puerta cerrada, después de un duelo de suspensión.

A lo largo de la semana se comentó que Chivas no podría recibir a la Máquina en ciertos inmuebles cercanos al estadio que fue vetado un partido luego de que un aficionado aventó una botella de vidrio, tras la conclusión del encuentro de Guadalajara contra América.

Pero un día antes del encuentro, la Liga dijo que la sede no fue vetada, sino el estadio, por lo que no hubo problema alguno en que este encuentro se llevara a cabo en la cancha del Jalisco.

Desafortunadamente, la cancha que lleva el nombre del estado se encontraba en malas condiciones para albergar un partido de la primera división profesional de nuestro país, ya que unos días antes se llevó a cabo un espectáculo de motociclismo, que dañó visiblemente la grama.

Tampoco le importó a la directiva la incomodidad de los aficionados para llegar al estadio, porque ayer en la Plaza de Toros El Nuevo Progreso, cercana al inmueble futbolístico, se llevó a cabo un concierto de Alejandro Fernández, lo que generó mayor caos del habitual en la zona, además de que se complicó el estacionamiento, porque el del estadio es pequeño y la afición al deporte de las patadas suele dejar el vehículo en la plaza de toros, que anoche dio prioridad al público musical.

Pero eso sí, la directiva y la Liga se embolsaron una jugosa cantidad de dinero, porque el Estadio Jalisco registró una espectacular entrada.