El Instituto Nacional Electoral defendió el proceso de licitación para la nueva credencial de elector para votar y aseguró que todo el procedimiento ha sido claro, transparente y ha contado con el seguimiento de testigos sociales, por lo que está previsto que el 10 de diciembre se dictamine al grupo que hará estas nuevas credenciales.
Explicó que licitación pública internacional abierta presencial ha sido vigilada por la Comisión Permanente del Registro Federal de Electores y el subcomité revisor de convocatorias, órganos colegiados que garantizan que cada modificación o aclaración quede fundada y documentada. Además, participa un testigo social, cuyas observaciones se integrarán al expediente y se difundirán públicamente.
Recordó que el 31 de octubre se dio la publicación de la convocatoria, mientras que el 7, 10 y 12 de noviembre hubo juntas de aclaraciones, el 20 de noviembre se dio la apertura de proposiciones y del 21 de noviembre al 10 de diciembre se hará la evaluación de propuestas y pruebas a las muestras de credenciales en la UNAM, para de inmediato dar el fallo final.
Precisó también que son tres los consorcios compiten en el proceso, Cosmocolor SA de CV con Icards Solutions y Talleres Gráficos de México; Litho Formas SA de CV con Indra Sistemas México, Toppan Security, INETUM España y México, Latin ID y DC Soluciones Tecnológicas; y Veridos México SA de CV con Giesecke y Devrient de México y Gráficas Corona JE.
Ante las críticas de algunos empresarios por la falta de piso parejo, el Instituto insistió en que las reglas han sido claras.
El nuevo modelo de credencial para votar contempla un sustrato teslin con durabilidad mínima de 10 años y laminado en poliéster. Incorpora elementos de seguridad como microtexto, tintas especiales, OVD, diseño de alta resolución y un elemento táctil para personas con debilidad visual. Además, estandariza hasta 50 caracteres para nombres y apellidos, integra códigos de barras, OCR y un QR de alta densidad con información pública comprimida y encriptada.
El INE aseguró que la transición hacia el nuevo contrato se realizará sin afectar el servicio a la ciudadanía, apoyándose en la planeación de la dirección ejecutiva del Registro Federal Electoral y en la experiencia del contrato vigente.

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