En México, cada año se registran 60 mil casos nuevos de cáncer en promedio, y el desabasto de medicamentos oncológicos continúa siendo un problema crítico que, de acuerdo con Alejandro Barbosa Padilla, director y fundador de Nariz Roja, ha impedido que entre un 10 y un 20 por ciento de los pacientes puedan salvar su vida.

Barbosa Padilla señaló que la inhabilitación de la farmacéutica PISA, encargada de producir entre 9 y 12 medicamentos esenciales, incluidos tratamientos pediátricos, marcó un punto de inflexión en la crisis de desabasto de medicamentos.

“La decisión administrativa de cerrar la producción de PISA no fue un resultado de la pandemia, sino una acción que generó un problema más profundo en el acceso a medicamentos esenciales para pacientes con cáncer”, afirmó.

Actualmente, los niños con cáncer enfrentan la falta de entre cuatro y cinco claves fundamentales, mientras que los adultos padecen un déficit de entre 10 y 12 medicamentos para diversos tipos de cáncer. Este desabasto provoca que los protocolos clínicos no puedan completarse, disminuyendo drásticamente la efectividad de los tratamientos y, en muchos casos, poniendo en riesgo la vida de los pacientes.

Un impacto que trasciende lo clínico

El desabasto no solo afecta la recuperación de los pacientes; también genera un impacto económico y emocional en las familias, quienes deben trasladarse largas distancias para buscar atención o medicamentos. En muchos casos, estos tratamientos incompletos han derivado en recaídas y muertes que podrían haberse evitado.

“Imagínense que les invito un chocomilk, pero no tengo chocolate. Así se sienten los tratamientos incompletos: son ineficaces”, ejemplificó el representante de Nariz Roja, destacando que no contar con una sola clave puede significar la diferencia entre la vida y la muerte para los pacientes.

Diálogo con el gobierno actual

Barbosa Padilla reconoció que la Secretaría de Salud, encabezada por David Kershenobich Stalnikowitz, buscó un acercamiento con Nariz Roja, lo que marcando una diferencia en comparación con la administración de Andrés Manuel López Obrador.

“En el sexenio anterior, las fundaciones fuimos señaladas y criticadas, incluso nos llamaron golpistas. Ahora hemos visto apertura y voluntad por parte del nuevo gobierno para iniciar un diálogo, lo cual agradecemos”, destacó.

Sin embargo, Barbosa Padilla expresó escepticismo respecto a las promesas de solución a corto plazo, como la llegada de medicamentos en marzo.

“Hasta no ver, no creer. Ya hemos escuchado muchas promesas en el pasado. Espero equivocarme, porque sería un gran logro para los pacientes, pero vamos retrasados y no se están tomando las decisiones más rápidas ni efectivas”, añadió.

La importancia de reactivar la producción nacional

El director de Nariz Roja subrayó que la solución más viable para combatir el desabasto sería reactivar la producción nacional de medicamentos, comenzando con PISA, cuya planta en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, es de primer nivel y está lista para operar, pero sigue sin obtener los permisos necesarios por parte de Cofepris.

“Si se reactiva la producción nacional, no solo se garantiza un suministro adecuado y de calidad, sino que también se generan empleos y una mayor recaudación fiscal. Hoy, la realidad es que muchos medicamentos oncológicos no están disponibles ni siquiera en farmacias de especialidades, y conseguirlos implica altos costos y trámites complicados con distribuidores”, explicó.

Un llamado a la solidaridad ciudadana

Ante esta crisis, Barbosa Padilla hizo un llamado a la ciudadanía para continuar apoyando a organizaciones como Nariz Roja, que actualmente construye un albergue en Chihuahua y planea otro en el norte del país para ayudar a pacientes y sus familias.

“Invitamos a la población a sumarse a través de nuestra página web https://narizroja.org/ o nuestras redes sociales. Este es un momento crítico, y solo con el esfuerzo colectivo podremos aliviar el sufrimiento de quienes enfrentan esta enfermedad. Entre todos podemos marcar la diferencia”, concluyó.

¿Qué es Nariz Roja?

Nariz Roja es una asociación civil sin fines de lucro que, desde hace 13 años, apoya a pacientes con cáncer de escasos recursos a través de servicios gratuitos.