Doscientos años de la doctrina Monroe: ¿Una amenaza latente para América Latina?

1, diciembre 2023

ABRAHAM PUEBLA A.

Foto: Reuters

“América para los americanos” resuena como un eco histórico de la doctrina Monroe, pronunciada por el presidente estadounidense James Monroe hace dos siglos. Sin embargo, lo que inicialmente fue presentado como un rechazo al colonialismo europeo se ha transformado a lo largo de la historia en un pretexto para la intervención estadounidense en América Latina.

A pesar de que la Administración demócrata de Barack Obama (2009-2017) consideró sepultada la doctrina, resurgió durante el mandato del republicano Donald Trump (2017-2021), quien aspira a regresar al poder en 2025, reviviendo temores latentes en la región.

Incluso el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció recientemente la conmemoración del bicentenario de la doctrina Monroe con una “voz de rebeldía y denuncia”. La persistencia de esta amenaza es evidente en la región, planteando interrogantes sobre su impacto en el futuro de América Latina.

 

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El origen y evolución de la doctrina Monroe

La doctrina Monroe surgió en 1823, cuando James Monroe arremetió contra el colonialismo europeo en su discurso sobre el Estado de la Unión. En un contexto en el que las naciones latinoamericanas buscaban independizarse, Monroe advirtió que cualquier intervención europea en América sería vista como una amenaza a la paz de Estados Unidos, generando respuestas contundentes.

Inicialmente, la doctrina fue bien recibida en Latinoamérica, ofreciendo respaldo frente al intervencionismo europeo. Sin embargo, a medida que la brecha de poder se ensanchó, surgieron recelos, y el llamado Corolario de Roosevelt en 1904 alteró significativamente la doctrina, permitiendo la intervención en asuntos internos latinoamericanos.

El corolario de Roosevelt es una sustancial alteración (llamada “enmienda”) a la Doctrina Monroe por parte del presidente de Estados Unidos Theodore Roosevelt. El corolario establecía que los Estados Unidos podían intervenir en los asuntos internos de países latinoamericanos si cometían faltas flagrantes y crónicas

Intervencionismo y Consecuencias

Este período más intervencionista, marcado por la ocupación militar y violaciones de derechos humanos, generó repudio en las izquierdas latinoamericanas. La doctrina Monroe, según Juan Battaleme, director académico del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales, refleja los debates internos sobre el papel de Estados Unidos en el mundo.

¿Una Doctrina Obsoleta o Vigente?

A lo largo de los años, la doctrina Monroe ha experimentado cambios de percepción. En 2013, John Kerry declaró su fin, abogando por una relación de igualdad con América Latina. No obstante, en 2019, John Bolton la invocó nuevamente durante la crisis en Venezuela. Aunque la Administración Biden busca desmarcarse de esta postura, líderes regionales como Maduro, Evo Morales, Andrés Manuel López Obrador, Daniel Ortega, y Miguel Díaz-Canel continúan refiriéndose a ella.

La reciente muerte de Henry Kissinger, arquitecto clave de la doctrina, cierra un ciclo en el bicentenario de su creación. Hoy, la competencia entre grandes potencias y la presencia disruptiva de China, Rusia e Irán plantean nuevos desafíos. Juan Battaleme, del International Institute for Strategic Studies, señala que la doctrina se encuentra “quebrada”, pero muchos países latinoamericanos siguen alineando sus intereses de seguridad con Estados Unidos.

Las elecciones presidenciales en Estados Unidos, con Trump como favorito, podrían marcar un nuevo capítulo en la historia de la doctrina Monroe. Según el historiador Paxton, todos los contendientes republicanos abogan por “usar a América Latina como fuente de poder”. Si alguno de ellos gana, la política exterior estadounidense podría experimentar un cambio significativo.