El secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubon, afirmó que el Plan México avanza conforme a lo previsto desde su diseño original, sin ajustes reactivos ante coyunturas externas, y subrayó que el gobierno federal mantuvo una planeación anticipada que permitió sostener su ritmo de ejecución en infraestructura, industria y desarrollo regional.

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El funcionario detalló que el portafolio de inversión asociado al Plan México ya supera los 297 mil millones de dólares confirmados, sin registros de sustituciones o cancelaciones, y con nuevas incorporaciones, lo que —dijo— refleja confianza empresarial y estabilidad en los compromisos adquiridos.

Ebrard indicó que los Polos de Desarrollo Económico para el Bienestar concentran una parte central de la estrategia, con orientación a detonar empleo y valor agregado en sectores prioritarios como el automotriz, logístico, farmacéutico y agroalimentario.

Precisó que el inicio de obras de estos polos está programado para el primer trimestre de 2026, como parte de un esquema gradual que combina planeación territorial, incentivos productivos y coordinación interinstitucional con gobiernos estatales y municipales.

Añadió que el calendario establece que seis de los 15 polos previstos alcanzarán plena capacidad en marzo de 2026, mientras que los nueve restantes lo harán durante el segundo trimestre del mismo año, conforme a los programas técnicos y financieros definidos.

En relación con las medidas arancelarias anunciadas por el gobierno federal, Ebrard las vinculó directamente al Plan México, al señalar que forman parte de una estrategia de protección de alrededor de 350 mil empleos frente a prácticas comerciales que afectaron a la producción nacional.

Insistió en que la política industrial y comercial no respondió a improvisaciones, sino a un diseño previo al inicio de la actual administración, lo que permitió articular infraestructura, inversión pública y privada, así como mecanismos de defensa del mercado interno.

Sobre un porcentaje específico de avance global, Ebrard explicó que cada rubro del Plan México cuenta con metas diferenciadas, por lo que el seguimiento se mantiene conforme a los objetivos planteados en cada componente, sin desviaciones relevantes respecto a lo programado.