ESTOY EN ESTO POR NECESIDAD: NARCOMENUDISTA

2, abril 2022

Gustavo Mares | Foto OEM-Informex

“Empecé en esto por necesidad. Yo creo que así empezamos todos”, afirma con palabras entrecortadas y la mirada fija en su interlocutor. Es “El Tortas”, narcomenudista que después de muchos intentos se decidió a platicar con este reportero sobre las labores que realiza para ganarse la vida, aunque sea infringiendo la ley.

Convencerlo no fue sencillo. Paradójicamente, encontrarlo, ponerse en contacto con él, no fue tarea difícil.

En un antro cualquiera como los que hay en los alrededores de la Zona Rosa basta con mostrarle al mesero o a los boleteros que abundan en la calle, la “inquietud” por conseguir una “grapa” (una dosis de cocaina9 y el resto lo hacen ellos.

Lo difícil fue convencerlo para hablar y cuando aceptó surgió otro inconveniente, extraerle las palabras pues al principio daba la impresión que se había arrepentido de hacerlo.

“Como te digo, empecé en esto por la falta de trabajo. Tuve otros trabajos, pero no sacaba lo suficiente para mantener a mi familia. Tengo esposa e hijos. No es que en esto se gane mucho, pero por lo menos ganas más que trabajando de albañil o chofer”, reconoce “El Tortas”, quien fue claro al decir, “nomás no preguntes chingaderas” y ante tan contundente declaración las ganas de conocer su nombre se fueron como por arte de magia.

‘UNA TIENDITA’

La entrevista se desarrolló en un restaurante de comida china muy cerca del metro Insurgentes. Ahí, “El Tortas” recuerda sus inicios: “Conocí a una chava que tenía una tiendita. Me ofreció darme 20 pesos por cada ‘grapa’ que vendiera. Se llaman ‘grapas’ porque antes eran de a gramo. Ahora son de dos o cinco puntos, es raro quien te compra un gramo de coca”.

“Esa tiendita era un negocio establecido. Ya había clientela fija y trabajaba las 24 horas del día. Entonces le pegábamos turnos de ocho horas. Hasta donde sabía, ella era parienta de un judicial. Por eso no había tanto problema”.

“Un día, después de mucho tiempo, nos cayó la federal y la tiendita se cerró”.

Mientras transcurría la entrevista, “El Tortas” se relajó. No se le notaba tan tenso, es más, daba la impresión que poco a poco se iba sintiendo un importante personaje de la farándula porque incluso, de tener las manos entrelazadas, ya las movía para hacer énfasis en ciertas palabras.

“Cuando cerró la tiendita, decidí independizarme. Ya sabía yo dónde se tenía que ir a comprar, dónde se surte uno. Además, en la tiendita conocí muchos compradores que tenían mi celular. Al no estar la tiendita, lógicamente las llamadas comenzaron a llegarme”.

HAY MARCAS

En el mercado, las “grapas”, tienen un valor de 100 a 500 pesos, según lo que conoce “El Tortas”.

“Y es que en la cocaína hay marcas. Los ladrillotes que llegan, tienen un sello. Unas tienen un revólver y pues así se le conoce, ‘la del Revólver’, otras tienen tres estrellas otras tantas más un venado, otra un alacrán. Hay muchas marcas y unas son mejores que otras”.

“La cocaína viene de Colombia y Bolivia. Aquí no se produce. Aquí lo que se produce es la mota (mariguana), pero no es negocio vender mota porque es muy barata y muy voluminosa. No se le gana mucho y además te ‘saca a balcón’ muy fácil”.

“Me imagino que antes de llegar al consumidor final, esa porquería pasa por cuatro manos. La de los que la importan pura; después los que la compran y la ‘cortan’; luego siguen los que compran para vendérnosla a nosotros”.

USO VETERINARIO

Al hablar de la pureza de la cocaína comenta, “no hay coca pura, toda la que compras ya está ‘cortada’. Claro que hay calidades. La coca se corta con Mamitol o Reinol, también puedes ‘cortarla’ con efedrina. En proporciones, a un kilo le pones 300 o  400 gramos de cualquiera de esos ingredientes y ya la tienes lista. Eso se hace para sacarle mayor ganancia”. El mamitol es una sustancia de uso veterinario que tiene diversos usos.

“Para poder subir al siguiente nivel en este negocio, debes tener dinero para poder comprar. Eso es todo. Un kilo de coca pura te vale 300 mil pesos y puedes llegarle a sacar 200 mil pesos. Pero para eso debes tener dinero”, subraya “El Tortas”, quien asegura que trabaja solo sin la protección de nadie.

“Sales a la calle y de a como te toque, de a ‘solín’”, apunta.

Uno podría imaginarse que anda armado, pero no. La razón, él mismo la comenta: “Si te detienen con un arma estás en un ‘pedo’ gordo. Porque te ‘chingan’ si te ‘atoran’ con un ‘plomo’. Si traes grapas solamente es menos difícil y si traes una sola, no tienes broncas porque dices que es para tu consumo”.

Aunque jamás menciona nombres, reconoce que es en el barrio de Tepito, donde muchos narcomenudistas se surten. “no se si ahorita esté así, pero por lo menos antes tu ibas a las casas donde surten y hay mesas muy largas, como esas donde venden barbacoa. Ahí venden de todo. Hay muchos vendedores y muchos compradores. Te surten en ‘chinga’ y así como te la van dando te mandan a ‘chingar a tu madre’. Ahora no se como esté ahí, pero por lo menos antes, hace unos años, así estaba. Ahora me surto en otro lado”.

AL RECLUSORIO

Los que andan en eso saben que están expuestos a ser detenidos por las autoridades. “El Tortas” ya experimentó en carne propia lo que se vive. “Cuando te ‘atoran’ los judiciales te chingan y te pegan tus ‘calentadas’ para que les digas quién te surte. Y lo hacen por una sencilla razón, por ejemplo, si a ti te agarran con veinte grapas, saben que el que te surte tiene más que tu y por lo mismo pueden sacarles más dinero. Pero aquí no se trata de echarte enemigos gratis. Si te atoran te callas y de ‘a como te toque’. Yo me ‘rifé’ un par de años en el Reclusorio Norte y es ‘cagado’. Fíjate que te meten por vender droga y ahí hay ‘de a madres’. La población ahí dentro es muy viciosa y con eso los tienen controlados”.

“Cuando hubo el motín en el Reclusorio Norte hace ya muchos años, cuando me tocó, fue por qué escaseó la droga. Fue en la época en que hubo el problema ese de la influenza. La droga faltó y todo se puso ‘color de hormiga’. Por ejemplo, un ‘bombón’, que es una bolita así de mota –y hace con los dedos índice y pulgar un círculo semejante al del tamaño precisamente de un bombón- valía 5 pesos, cuando escaseó llegó a valer 50 pesos”.

‘MÁS PERSONAS’

El entrevistado, que comía opíparamente, de repente comentó: “Hay más personas de las que uno se imagina”.

Afirma, sin decir nombres que “mira, hay políticos y famosos que están metidos de alguna u otra manera. En cada sexenio los políticos apoyan a determinado cártel. Ah, porque los cárteles apoyan a muchos gobiernos, les meten dinero a sus campañas y lógicamente, si salen te apoyan y ‘chingan’ a los otros. Eso todos lo sabemos. Así se manejan las cosas”.

“Unos cabrones que conocí, que empezaron como yo, después se dedicaron a llevar trailers de mota a Estados Unidos. Me cuentan que tienen horarios y rutas para transportarla al otro lado”.

“Por ejemplo, mandan al trailero por ciertas rutas y saben con quien ‘reportarse’. Pasan por las aduanas. Hay muchas personas metidas, incluso gringos. Esto es una industria, claro, los que le meten más lana son los que ganan más, pero esto es una industria”.

Tras estas palabras, la apatía volvió a “El Tortas” y claramente denotó que ya no quería seguir hablando del tema y cambió la conversación. “Oye está cabrón el grupo que le tocó a México en el Mundial, ¿verdad?”, preguntó.

Llegó el momento de despedirse, pero antes una última pregunta: ¿Has pensado en cambiar de actividad?

“La neta no. Uno siempre quiere más”.