París, Francia / Enviado.- Desde las gradas de la Esplanade des Invalides un “¡no era penal, Gaby!”, se escucha para provocar las risas del público mexicano presente. Para muchos, la frase pasó desapercibida, pero entre los compatriotas presentes en el duelo por el bronce del tiro con arco por equipos femenil entre México y Países Bajos, esa exclamación tiene una connotación que data de una década atrás, cuando ambos países se enfrentaron en el Mundial de Fútbol Brasil 2014 y las cosas no terminaron del todo bien.

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Para colmo, el grito fue lanzado a Gabriela Schloesser-Bayardo, quien por cosas del destino ahora viste de anaranjado y no de verde. Esto se originó cuando se naturalizó neerlandesa al contraer matrimonio con el también arquero Mike Schloesser, por lo que decidió mudarse al país europeo con su marido y, por ende, le era evidentemente más sencillo entrenar con las holandesas.

“La verdad es que sí fue bastante difícil, sinceramente siento que al principio fue algo complicado. Siempre puse al tiro con arco enfrente de todo, desde que tengo 12 años, al frente de mi vida. Fue lo que más predominó en mi vida y dejarlo y luego no tener un año de competencias y luego integrarse en otro equipo, las diferencias culturales entre holandeses y mexicanos son gigantes y la verdad es que está difícil adaptarse a otra cultura”, dijo Gabriela en entrevista con OVACIONES.

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Cuando supo que el destino quería enfrentarla con la selección de la que antes formó parte hasta que hace poco más de seis años cambió de bando, el nerviosismo se apoderó de ella, pues sabía todo lo que conllevaría enfrentarse con sus excompañeras, particularmente, contra Alejandra Valencia, a quien conocía de sobra.

“Antes de la competencia no nos hablábamos mucho. La verdad es que se sentía la tensión, yo traía a mis chicas y obviamente queríamos ganar y teníamos esas ganas que también las otras chicas de México tenían y no hablamos antes de la competencia. Después de que la competencia pasó, las abracé, me dio muchísimo sentimiento. Yo crecí con Ale (Valencia), nos conocemos desde que teníamos 15 años, entonces estoy súper feliz por ella. La primera pregunta que me hicieron cuando nos ganaron fue: ‘¿qué se siente haber perdido contra tu equipo?’ y la verdad es que me solté a llorar porque la tensión era fuerte”, compartió.

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La tiradora nacida en Tijuana, Baja California, 30 años atrás, no pudo evitar que su equipo cayera por marcador de 6-2 ante el combinado nacional representado por Ángela Ruiz, Ana Paula Vázquez y su amiga originaria de Hermosillo Sonora, relativamente cerca de su lugar natal. Y múltiples bromas acerca del famoso “No era penal”, aparecieron en su horizonte a caudales.

“En la competencia me gritaron: ‘¡Gaby, tú eres mexicana y no era penal!’, sinceramente no es algo que no me pase siempre, es algo que hace clic en las dos culturas pero igualmente tampoco tengo atención a cosas que puedan ser negativas”, mencionó.

Pero no por eso, Gaby ha dejado de querer a México, mucho menos a sus excompañeros y amigas. Al contrario, reconoció que recibió apoyo en todo momento durante su estancia en el equipo con el que asistió a sus primeros Juegos Olímpicos en Río 2016.

“Todos los momentos son bonitos, la verdad fue especial para mí, agradezco mucho que me apoyaran. Mucha gente piensa que en Europa todo está bonito pero los mexicanos tenemos buenos entrenadores y el deporte es bien apoyado en México, cuando estuve ahí eran entrenadores de buena calidad y no salió todo como hubiera querido pero en Países Bajos me han tratado muy bien”, sentenció.