Gusano barrenador. Foto: Cuartoscuro México amplió la emergencia nacional de sanidad animal ante la expansión del gusano barrenador del ganado —plaga provocada por la mosca Cochliomyia hominivorax—, cuya presencia en animales de sangre caliente impulsó a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) a extender el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal en las ocho regiones zoosanitarias del país, con vigilancia obligatoria y controles estrictos en movilización pecuaria.
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La Sader publicó en el Diario Oficial el acuerdo que fortalece el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal de México (Dinesa), mecanismo que adquirió carácter nacional por el riesgo de que la plaga avance hacia zonas ganaderas del norte, donde la vulnerabilidad económica y sanitaria generaría pérdidas de gran escala para productores y comercializadores.
La emergencia establece la notificación inmediata de cualquier gusanera en heridas de mamíferos o aves, obligación que recae en veterinarios, transportistas, ganaderos y público en general, quienes deben reportar a través de la app AVISE, líneas telefónicas o mensajería con evidencia fotográfica en caso de contar con ella.
También fija que todo bovino, bufalino, bisonte, ovino, caprino y porcino debe contar con un Certificado Zoosanitario de Movilización, con constancia de tratamiento contra el gusano barrenador y revisión física previa, lo que implica controles reforzados en puntos de verificación federal y baños insecticidas obligatorios.
La ampliación del dispositivo incorpora restricciones adicionales al transporte de equinos procedentes de regiones afectadas, debido al papel que estas especies pueden desempeñar en la dispersión de la plaga hacia zonas donde antes se mantenía erradicada.
La Secretaría de Agricultura indicó que está prohibido movilizar animales enfermos, fatigados, heridos o con gusaneras, a fin de impedir que larvas presentes en tejido vivo se conviertan en focos de reproducción capaces de expandir la plaga durante traslados intermunicipales o interestatales.
Perros y gatos también han sido contagiados
El acuerdo incluye recomendaciones directas para propietarios de animales de compañía, pues perros, gatos y roedores también figuran entre los casos confirmados, por lo que deben recibir atención veterinaria inmediata ante cualquier herida susceptible de convertirse en un foco activo.
La emergencia retoma además datos epidemiológicos del último año, periodo en el que México acumuló nueve mil 574 casos en 13 estados, con mayor concentración en Chiapas, donde se documentaron cuatro mil 636, cifra que explica la relevancia de la frontera sur como zona de atención prioritaria.
Del total de casos, siete mil 226 correspondieron a bovinos, lo que ubica al sector ganadero como el más afectado, aunque también hubo mil 118 perros, 19 gatos, 471 equinos y 236 ovinos, un indicador del alcance de la plaga en animales domésticos y de trabajo.
La emergencia subraya que Chiapas, Oaxaca, Tabasco y municipios del sur de Veracruz integran la zona de mayor riesgo, seguida por Yucatán, Quintana Roo y Campeche, mientras que Chihuahua, Sonora, Jalisco, Puebla, Hidalgo y Ciudad de México ingresaron al esquema preventivo obligatorio.
La presidenta Claudia Sheinbaum reconoció que aún no hay fecha para reabrir la frontera a exportaciones de ganado hacia Estados Unidos, aunque destacó que Washington ha reconocido los avances mexicanos contra la plaga y mantiene comunicación técnica continua.
Estados Unidos cerró en tres ocasiones su frontera al ganado mexicano en los últimos doce meses, la más reciente el nueve de julio tras un caso registrado en Veracruz, lo que afectó un comercio anual que históricamente supera un millón de cabezas y representa cerca de 60 por ciento de sus importaciones de bovino vivo.
El acuerdo firmado por Julio Antonio Berdegué modifica y amplía disposiciones emitidas desde julio de 2024, las cuales ya habían tenido extensiones en enero y junio de 2025, con el fin de sostener una estrategia de largo aliento que reduzca riesgos de dispersión.
