Con respecto al llamado que hizo este fin de semana a los paisanos que viven en Estados Unidos, en el sentido de movilizarse en caso de que el Congreso del país vecino apruebe gravar las remesas, la presidenta Claudia Sheinbaum manifestó: “Esta semana hay pocos senadores estadounidenses en su recinto, pero la próxima semana regresan. Así que (en ese momento) regresarán los senadores mexicanos. También hay muchas organizaciones civiles con las que ha estado en contacto el embajador de México, Esteban Moctezuma”.

Asimismo, dijo, “sobre todo ciudadanos méxico-estadounidenses han estado haciendo cartas y comunicados para rechazar la medida impositiva. Hay que decir que este impuesto es para todo el mundo, no sólo para México, pero sí somos el único país que ha expresado su desacuerdo. Así que vamos a seguir trabajando allá, en Estados Unidos, en el marco de su ley para poder hablar de manera permanente con los senadores y explicar la afectación que la medida generaría, incluso para la propia economía de la Unión Americana”.

En ese marco, acotó la presidenta, “sólo si es necesario organizaremos movilizaciones pacíficas que muestren nuestro desacuerdo y nuestros argumentos al respecto, pues no estamos de acuerdo en que se cobren impuestos a los que menos tienen. La Constitución mexicana establece claramente que los impuestos deben ser progresivos, es decir, que pague más el que más tiene. Pero, además, en el caso de nuestros paisanos, ellos ya pagan impuestos independientemente de su situación migratoria: las personas que no tienen documentos, que trabajan allá y hacen funcionar la economía de Estados Unidos pagan impuestos”.

En ese sentido, acotó: “Ellos pagan esos impuestos por trabajo y por consumo. Solamente el 20% de lo que ganan se traduce en remesas. También hay un convenio firmado en 1992 con Estados Unidos que establece que no debe gravarse dos veces, pues sería discriminatorio. Los afectados principales serían quienes reciben esas remesas en México, es decir, los que menos tienen”.

Pero no son los únicos argumentos en contra de la propuesta de gravamen, aseguró Sheinbaum: “Por ejemplo, disminuir la migración de mexicanos a Estados Unidos tiene que ver con que encuentren trabajo en sus comunidades y vivan bien; en ese sentido, las remesas ayudan a las familias de escasos recursos a no migrar. Esperamos que todos estos argumentos lleven a que no se graven las remesas en el caso de México”. En cuanto al llamado a la movilización, afirmó, “sería desde México”.