Inocente palomita

28, diciembre 2022

CATALINA NORIEGA

Cuarto año en el que nos hacen -o a aquellos que creyeron o creen a pies juntillas en su mesías- ¡inocentes! El engaño constante, la mentira diaria de este Régimen brinca por todos lados, sin que, como ciudadanos comunes y corrientes, tengamos posibilidades de defensa.

El tlatoani nos ha tomado el pelo sin control. Empezó con su cuento de que la gasolina bajaría a diez pesos el litro, lo que no sólo no ha pasado, sino que sube estrepitosamente. Un energético indispensable en todos los renglones de la vida cotidiana, que propicia el incremento del precio de los productos que consumimos, desde el momento en el que todo necesita transporte.

Nos hizo inocentes con su cuento de la corrupción en la construcción del aeropuerto de Texcoco, al que mandó al caño para sustituirlo por una terminal corrientita, ¡inodora, incolora e insípida!, además de inútil, por las dificultades de acceso. ¿Y la corrupción que tanto dijo que iba a perseguir? Jamás ha entregado una sola prueba de que existiera ni se ha sometido a nadie a proceso ni fue nada más que uno de sus cuentos chinos, con los que se burla de ese “pueblo bueno” que lo sigue fiel. Lo cierto es que, de acuerdo al exsecretario de Hacienda, Urzúa, se desperdiciaron más de 300 millones de pesos y el AIFA requirió de mayores cantidades que las que dijo iba a costar. Los beneficiarios del entuerto, por supuesto los soldados, mejor dicho, los altos mandos que pongo en duda sean tan honrados, como dicen ser (Ojalá y me equivoque).

De sus otras dos ¡magnas! obras, ni qué decir. Una refinería que se inunda cada que caen dos gotas de agua y que, para empezar a refinar un barrilito de petróleo, necesita cuando menos, de otros dos años. Eso sí, su “genial” hacedora, la señora Nahle, tiene todo tipo de acusaciones por beneficiar a parientitos y amigos con contratos mega millonarios, sin que se abra a la luz pública la contabilidad del mamotreto de Marras. La transparencia en este mandato, salvo alguna nota de que el presupuesto de las tres mamarrachadas supremas se ha ido al alza, es inexistente. Cuando el mundo deja de hacer refinerías, porque serán obsoletas a corto plazo, él, “sabio de sabios”, considera que es pertinente dotar a Veracruz con Dos Bocas, a precio de oro. 

¿Y su trenecito? Si no estuviera expuesto a juicios internacionales, por sus constantes violaciones a la Constitución, habría que procesarlo ante la Corte de La Haya, por ecocida. 

El desmantelamiento de la selva, para dar paso a unas vías que de acuerdo a voces expertas no servirán para maldita la cosa, es inaudito. Se han talado millones de árboles y se han destruido incluso, cenotes, patrimonio histórico y se fragmentarán diversos ecosistemas en la península de Yucatán. 

Un daño irreversible al medio ambiente, que pagaremos generaciones de mexicanos, además del planeta entero. Al fragmentar su construcción, ni siquiera todavía se puede dimensionar en su totalidad, las afectaciones ambientales. 

Desde que llegó a Palacio hizo inocente al género femenino, al que se comprometió a apoyar. Eliminó las guarderías infantiles, indispensables para las madres trabajadoras, luego los refugios para las mujeres violentadas y en estos cuatro años no se ha visto un paso adelante a favor de los derechos de la mujer. Por el contrario, misoginia pura. 

Inocentes palomitas que caímos en el pico de este halcón. Desde que llegó al poder, vivimos en el día de los inocentes. 

catalinanq@hotmail.com

@catalinanq