Cuando Checo Pérez pilotaba para Red Bull Racing, debía hacer caso omiso de comentarios cargados de racismo y xenofobia. “Quizás tomó tequila ayer. Checo estaba durmiendo”, ironizó una vez sobre el mexicano, Helmut Marko, asesor del equipo de Milton Keynes. “Como sudamericano, generalmente tiene mucho altibajos”, también lanzó. Sin que ninguna autoridad dijera nada.

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Ahora, Mohammed Ben Sulayem, el presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), publicó un comunicado tras el abuso en redes sociales vertidos sobre el japonés Yuki Tsunoda. Esto ocurrió después de que seguidores de Franco Colapinto publicaran mensajes hirientes en español dirigidos al nipón.

Los fanáticos de Colapinto reprocharon al asiático después de un pequeño incidente entre los dos pilotos durante la primera práctica del Gran Premio de Emilia Romagna. En la declaración de Ben Sulayem, pidió que ningún piloto sea sujeto a lo que enfrentó Tsunoda.

“El automovilismo se basa en la competencia, la pasión y el compromiso, y cada piloto sale a la pista representando estos valores. La pasión y el entusiasmo que sentimos por nuestro deporte deben unirnos y nunca convertirse en abuso ni odio. Apoyo plenamente a Yuki Tsunoda y Franco Colapinto, y les agradezco por denunciar el creciente problema del abuso online en el automovilismo”, se puede leer en la misiva.

“Nadie debería ser objeto de amenazas, odio ni discriminación. No hay cabida para el abuso ni la toxicidad en nuestra comunidad. A través de la campaña Unidos contra el Abuso en Línea, estamos tomando medidas decisivas: concientizando, brindando apoyo e impulsando el cambio”, añadió.

Lo cierto es que tras el fallido ascenso de Liam Lawson y el experimento con Yuki Tsunoda, cada vez es más evidente que Sergio Pérez, despedido de Red Bull el año pasado, fue el mejor de todos, e inclusive, el que más soportó las inclementes críticas provenientes de su mismo equipo. Y ni qué decir de las siempre mordaces redes sociales.

Rubens Barrichello sí pide perdón a Checo Pérez

El expiloto de Fórmula 1, Rubens Barrichello, admitió haber cambiado su perspectiva sobre Checo recientemente, luego de mirar el desempeño de sus sucesores en el asiento más caliente del Gran Circo.

“Estar en el coche hermano de Max Verstappen es el trabajo más difícil de la F1. Hay mucha presión. Desafortunadamente, no recibes el respeto cuando desempeñas ese papel. Sinceramente, creía, desde el fondo de mi corazón, que Sergio Pérez no era la persona indicada para pilotar junto a Verstappen en Red Bull, pero al final lo hizo muy bien. Demostró que es la persona indicada para ese puesto”, reconoció.

“Ganó Mónaco con Verstappen como compañero de equipo. Puede que Red Bull haya esperado demasiado para deshacerse de él, pero demostró que muchos estaban equivocados. Cuando veo que hablan mal de Pérez, ahora lo defiendo. Lo hizo muy bien. Red Bull necesitaba un cambio, y Pérez también lo necesitaba. A Tsunoda le falta el talento para igualar a Verstappen”, continuó Barrichello.

Lawson no sumó un solo punto en el breve tiempo que pasó como piloto de Red Bull, mientras que Tsunoda acumula únicamente 10, con ningún Top 5, al cabo de cinco carreras en el equipo principal. Hace un año, a estas alturas, el tapatío de 35 años de edad presumía cuatro podios repartidos en tres segundos lugares y un tercero; así como un cuarto puesto en Miami. Y sin embargo, Checo sigue sin recibir disculpas.