La nueva estrategia del futbol

28, julio 2023

LUIS HUMBERTO FERNÁNDEZ

Hace unos días el comisionado presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Juan Carlos Rodríguez, anunció su plan para fortalecer al futbol mexicano que consiste en una estrategia que aspira a ser integral e incluye: reunir a expertos en selecciones nacionales, crear dos centros de alto rendimiento, y una restructura corporativa, comercial y de internacionalización centrada en el desarrollo del futbol. Este plan es un esfuerzo interesante y saludable, sin embargo, no atiende el tema medular que es la corrupción y el extravío ético del futbol.

La realidad es que mientras no se atienda la causa fundamental del triste estado del futbol mexicano, que es la corrupción y priorizar los intereses comerciales sobre los deportivos, el resultado será magro. La corrupción en el deporte tiene muchos indicios, el reportaje “El Cartel del Gol en México” lo documenta. También hay casos de evasión fiscal, contratos irregulares, las declaraciones de Vucetich y las contrataciones turbias de jugadores; el papel de los hechos es tal cual y fuera trata de personas, y testimonios hay muchos. Mientras no se ponga al aficionado y las cuestiones del desarrollo deportivo sobre otros aspectos, el futbol mexicano estará condenado. Y si bien entendemos que el futbol es un negocio, ha sido tan bueno, que es también es un motor de desarrollo; el dilema ahora es entre generar ganancias inmediatas o generar un crecimiento sólido y de largo plazo.

Es de mínimo sentido común que, si la gallina de los huevos de oro para la federación es la organización de partidos en los Estados Unidos, la pregunta de fondo es ¿cuánto tiempo creen que se va a tardar la afición en cansarse de ir a verlos perder? en especial cuando hoy ya no existe el futbol gratuito, hay que pagar para verlo. El plan de Rodríguez es un buen avance, pero si no se hace una reforma ética que retome el desarrollo de la visión deportiva nacional y destierre la mezquindad en corto plazo y la voracidad por recompensas inmediatas, no saldremos de esta espiral de podredumbre.

El dilema es muy sencillo, ¿quién importa en el futbol mexicano? los obscuros señores, como lo son algunos dueños de clubes, pero sobre todo algunos representantes voraces, nocivos y despreciables, técnicos que no se toman en serio su trabajo (saludos al Tuca) y que traen a sus cuates a los equipos, o la afición que les da de comer y que patrocina su opulencia. XXX TWITTER

@LuisH_Fernandez