Mejorar el bienestar de los hogares solo podrá lograrse con la creación sostenida de empleos bien remunerados, se requieren alrededor de 10 millones, advirtió el sector empresarial, y observó que una disminución en el desempleo no siempre reflejará una situación favorable, pues más bien puede señalar aspectos como un mayor nivel de subocupación, por lo que la generación de más puestos de trabajo y mejor remunerados debe ser un objetivo inmediato.

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Así lo advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), en su análisis semanal, en el que señaló que la confianza es un factor fundamental que contribuye a la creación de empleos, el fortalecimiento de la inversión privada y en las decisiones de consumo de los hogares.

Consideró que mientras la percepción sobre el contexto económico no mejore, es poco probable que empresas y hogares tengan los incentivos necesarios para invertir y consumir.

El organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), observó que los datos del mercado laboral reflejan la necesidad de nuevos puestos de trabajo que solo será atendida a través de mayores flujos de inversión que propicien la actividad productiva.

Advirtió que “considerar que la población desocupada (1.5 millones de personas) es el indicador más amplio de los empleos que requiere el país es una visión parcial. El no tener empleo, pero estar buscándolo activamente, es la forma en que se define el desempleo.

“También están aquellos que tienen un empleo de tiempo parcial, pero que requieren un trabajo de tiempo completo y se definen como población subocupada (3.9 millones de personas). Tal vez lo más preocupante se refleja en todas aquellas personas que desistieron de buscar un empleo y los que no lo hacen por considerar que no tienen posibilidad de encontrarlo a pesar de estar disponibles para trabajar, los cuales se reportan como población no económicamente activa disponible (5.3 millones de personas)“, señaló.

Comentó que cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del primer trimestre de 2025 muestran que la suma de estos segmentos, que se define como brecha laboral, asciende a un total de 10.7 millones de personas que están en busca de un puesto de trabajo o cambiar por uno de tiempo completo. La cifra, si bien se ha venido reduciendo, aún está muy alejada de los 1.6 millones de personas definidas como desempleados en el país.

El CEESP indica que esta situación refleja, en parte, la razón por la cual la economía no se recupera plenamente, toda vez que además de la significativa necesidad de nuevos puestos de trabajo, es importante que sean trabajos de tiempo completo y mejor remunerados.

Comenta que ante la acotada demanda de empleos de empresas y establecimientos, y la importante oferta de empleo por parte de la población, se genera un fenómeno de salarios bajos, pues quienes logran colocarse aceptan salarios más bajos con tal de tener un ingreso seguro.

Y si bien el salario mínimo ha aumentado significativamente a partir de 2019, beneficiando a los trabajadores de menores ingresos, también es cierto que esto pudo incidir en la precarización del mercado laboral, pues se observa que, del cierre del 2018 al primer trimestre de este año, mientras que el número de trabajadores que ganan hasta dos salarios mínimos aumentó en 17.5 millones de personas, los que tienen ingresos superiores a dos salarios mínimos se redujo en 13.9 millones.

“Es un hecho que la generación de más puestos de trabajo y mejor remunerados debe ser un objetivo inmediato. Solo de esta manera será posible mejorar la situación de los hogares, impulsar el mercado interno, mejorar los niveles de confianza del consumidor y del sector empresarial, de tal manera que la inversión aumente de manera sostenida para fortalecer el crecimiento del país”, puntualizó el organismo.