La NBA ha desvelado los primeros resultados de la votación para el próximo Juego de las Estrellas 2026, mismo que promete ser histórico. La imagen preliminar pinta un escenario inédito y revelador, con Luka Dončić, la estrella de Los Angeles Lakers, holgadamente al frente de la votación en la Conferencia Oeste, mientras que Giannis Antetokounmpo, de los Milwaukee Bucks, está a la cabeza de los votos en el Este.
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Los aficionados, que poseen el 50% del peso en la decisión final, han apostado por una contundente presencia internacional y, como novedad bajo el nuevo formato, por un desbalance radical en las posiciones dentro de los equipos. Es así que en lo más alto de las preferencias se confirman dos figuras globales indiscutibles.
Dončić es seguido de cerca en el Oeste por Nikola Jokić, Stephen Curry, Shai Gilgeous-Alexander y Victor Wembanyama, lo que significa que los tres jugadores más votados de toda la liga —Dončić, Antetokounmpo y Jokić— pertenecerían al equipo internacional. Ese dominio extranjero se extiende a la línea interior.
Mientras que los mejores jugadores interiores estadounidenses en la votación son todos aleros como Kevin Durant, LeBron James o Jaylen Brown, el equipo internacional acumula talento en la pintura con nombres como los ya mencionados Antetokounmpo y Jokić, además de Victor Wembanyama, Karl-Anthony Towns, Alperen Şengün, Pascal Siakam y Deni Avdija. Esta concentración de talento ‘big man’ contrasta fuertemente con la escasez de bases en su nómina, donde por ahora solo destacan Dončić y SGA.
La situación es inversa para el combinado estadounidense. La nueva regla que elimina las designaciones específicas por posición (delantero/defensa) ha tenido un efecto inmediato, pues los cuatro jugadores más votados en el Este después de Antetokounmpo son todos bases, con Tyrese Maxey, Jalen Brunson, Cade Cunningham y Donovan Mitchell. Esto proyecta una plantilla estadounidense predominantemente formada por bases y aleros, con una notable ausencia de pívots o alas-pívot tradicionales entre los más votados.
No obstante, esto es solo una instantánea preliminar. El voto de los aficionados representa la mitad de la ecuación; los jugadores (25%) y un panel de medios (25%) completarán el resultado final que determinará a los titulares.
Además, el comisionado Adam Silver tiene la facultad de seleccionar jugadores adicionales si la distribución natural de los votos no logra conformar los tres equipos requeridos por el nuevo formato de dos equipos de Estados Unidos y uno internacional, que competirán en un torneo de todos contra todos en el recién estrenado Intuit Dome de Inglewood, California, a partir del 15 de febrero de 2026.
La próxima actualización de votos, prevista para el 6 de enero, ofrecerá más claridad. Pero el primer vistazo ya esboza que la NBA es una liga dominada por talento global, y los aficionados están dispuestos a marcar el camino hacia un All-Star Game donde las fronteras y los esquemas posicionales tradicionales podrían quedar redefinidos.
