La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó que la Megafarmacia del Bienestar sigue funcionando como centro de distribución nacional de medicamentos, y adelantó que su gobierno presentará información detallada sobre su operación y alcances dentro del sistema de salud pública.

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Durante su conferencia, la mandataria confirmó la vigencia del proyecto, al señalar que el almacén continúa abasteciendo medicamentos en todo el país, y subrayó su importancia como infraestructura estratégica para los programas federales de salud.

Sheinbaum explicó que la Megafarmacia del Bienestar podría ser compartida con el IMSS, luego de que el instituto manifestó la necesidad de ampliar su capacidad de almacenamiento en el Estado de México, por lo que solicitó a Birmex el uso de parte del inmueble.

“Sí, sigue funcionando para distribuir a todo el país y vamos a informarlo pronto, es un espacio importante y muy probablemente sea compartido con el Instituto Mexicano del Seguro Social, que requiere mayor capacidad de almacenamiento”, señaló.

La presidenta precisó que la Megafarmacia no opera como un único punto de entrega, sino como parte de un esquema integral de distribución, vinculado al programa Salud Casa por Casa, que coordina la prescripción médica domiciliaria con la entrega posterior de medicamentos.

Aclaró que los estantes exhibidos públicamente corresponden a medicamentos específicos del programa y no representan la totalidad del inventario, ya que el modelo contempla distintos espacios logísticos y mecanismos de entrega, según cada región del país.

Sheinbaum detalló que los medicamentos distribuidos se enfocan en el tratamiento de enfermedades crónicas, como diabetes e hipertensión, principalmente en personas adultas mayores, conforme a criterios establecidos por la Secretaría de Salud.

Añadió que en comunidades con clínicas de espacio limitado, los puntos de entrega se habilitan en zonas externas o instalaciones alternas, siempre bajo condiciones sanitarias avaladas por Cofepris y con personal autorizado.

Finalmente, reconoció que la entrega directa a domicilio fue considerada inicialmente, pero representó retos logísticos, por lo que el gobierno evaluará y ajustará el modelo en los próximos meses para garantizar el acceso oportuno y continuo a medicamentos.