Contexto
Continúan las reuniones en Washington entre las contrapartes de México y Estados Unidos, para definir los avances en eliminación de barreras arancelarias y conocer el futuro de corto plazo de los aranceles para México, establecidos para el próximo sábado 1 de noviembre. Una llamada entre Claudia Sheinbaum y Donald Trump asegura la extensión del plazo para la entrada en vigor de los aranceles, contrario a lo que sucedía con Canadá.
En este entorno, México ha logrado reducir al máximo el impacto de los nuevos aranceles globales y asegurar condiciones más favorables, basado en la revisión de las barreras no arancelarias, siendo en promedio 80% temas técnicos de rápida resolución, que Estados Unidos ha pedido eliminar previo a noviembre.
En este proceso, destaca que se ha fortalecido la relación con EU y se avanza en propuestas sobre acero y vehículos, con una ruta concreta para 2026, de amplias oportunidades para consolidar la competitividad global de México, en visión del secretario de Economía, Marcelo Ebrard.
El estatus de las negociaciones
Donald Trump ha hecho énfasis en que podría dividirse el T-MEC en acuerdos bilaterales, lo que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha mencionado como un escenario; sin embargo, Marcelo Ebrard, secretario de Economía, reiteró en días pasados, ante los empresarios del país, que se logró iniciar la revisión coordinada entre los tres países.
Sin embargo, el entorno marca un rompimiento de las negociaciones de Estados Unidos con Canadá y la imposición de 10% de aranceles para aquel país por el desencuentro de este fin de semana, en el que Donald Trump estuvo a disgusto con un anuncio de la provincia de Ontario en contra de los aranceles.
En tanto, el T-MEC siga siendo el eje comercial de Norteamérica, continuará la fuerte posición económica de los países, y el resultado de las negociaciones del 01/06/26 podría derivar en cuatro escenarios:
- Consenso para su aprobación por otros 16 años, hasta 2042.
- Falta de consenso, con revisiones anuales y su terminación en 2036.
- Apertura total a las negociaciones, con nuevas definiciones y plazos.
- Rompimiento del T-MEC y la apertura de dos tratados bilaterales por parte de Estados Unidos.
Las presiones más recientes de Estados Unidos hacia México derivaron incluso en la imposición de aranceles de hasta 50% a las importaciones de países sin TLC con México, que se estima podría afectar principalmente a China, y en modificaciones al programa IMMEX (Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicio de Exportación), para exentar impuestos a la importación temporal de materias primas e insumos, para su transformación y posterior exportación del producto.
Aunque han sido medidas controvertidas, se observa que en su implementación se busca fortalecer la producción nacional y el mercado interno, para equilibrar el comercio con algunos países, pero principalmente reposicionar la economía mexicana a nivel global. Así, se lanza la campaña “Hecho en México” y se toman acciones que apuntalen la posición del país.
En conclusión
El futuro del T-MEC está en manos de Donald Trump, al igual que el entorno económico global; la geopolítica marca la ruta del dinero, y aunque muchos países no estén de acuerdo, la mayoría busca evitar los aranceles y hacer acuerdos con Estados Unidos que les permitan fortalecer su comercio.
En tanto esto sucede, Canadá pone en riesgo su estabilidad con Estados Unidos y México consolida su posición como un socio confiable, con la capacidad de atraer más inversiones.
Finalmente, a partir de hoy sabremos el resultado de las conversaciones entre China y Estados Unidos, y cómo se dan los avances entre las principales potencias económicas globales.




