Luis Garduño | ESTO MARTÍN AVILÉS
Foto: Luis Garduño | ESTO
Han pasado 56 años desde que México albergó por única vez los Juegos Olímpicos en el ya lejano 1968. Desde entonces, el sueño de traer de vuelta la justa veraniega a territorio azteca, se ha quedado en eso, en un simple anhelo que se esfuma tan pronto llega otro país con mayor infraestructura y mejor propuesta económica.
Apenas hace un par de años, en octubre de 2022, Marcelo Ebrard, entonces secretario de Relaciones Exteriores, formalizó el interés por postular abiertamente al país como candidato para acoger los Juegos Olímpicos de 2036, una posibilidad que ahora es nula.
Y es que una charla que tuvo María José Alcalá, presidenta del Comité Olímpico Mexicano, con el Comité Olímpico Internacional (COI) lo cambió todo, pues países como India, Indonesia, Turquía y Polonia que ya estaban en la contienda, así como otros más que se sumaron, complicaron el panorama.
“Tuvimos una plática con el Comité Olímpico Internacional y vimos que la competencia está muy dura. Estamos dando un giro, para ver si podemos tener la propuesta para los Juegos Olímpicos de la Juventud, que es donde tendríamos una gran posibilidad”, señaló Alcalá durante la presentación de Bimbo como patrocinador del COM de cara a París 2024 y Los Ángeles 2028.
Pero para organizar los Juegos Olímpicos de la Juventud, existen muchas más posibilidades. Alcalá confirmó que ya entabló pláticas para conocer las posibilidades y los requerimientos. La próxima edición de la justa se celebrará en Dakar, en el 2026, por lo que México buscaría la edición del 2030 o el 2034.
“Hemos visto las posibilidades que hay fuertes competencias y cuál es el proyecto que puede ser ‘ad hoc’ al país para el Comité Olímpico y el país, hemos tenido diferentes pláticas con el COI y ahí también estamos caminando”, sentenció.
