México se fue sin goles ante Costa Rica, pero clasificó primero; va ante Arabia Saudita

Al Tri le anularon un gol por un fuera de lugar polémico en el último minuto; en cuartos, jugará en Phoenix



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Santiago Giménez había clavado un golazo de tijera en el último minuto para la victoria de México; sin embargo, un polémico fuera de lugar, le quitó el gol y el Tri empató a cero goles ante Costa Rica en el Allegiant Stadium de Las Vegas.

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Con la igualada y por un gol más en su diferencia de goles, la Selección Mexicana viajará a Phoenix, Arizona, donde el próximo sábado 28 de junio enfrentará a Arabia Saudita por el pase a las semifinales del torneo.

Habían sido dos malas presentaciones con victoria de la Selección Mexicana en esta Copa Oro, por lo que la asignatura pendiente de ganar, jugar bien y convencer, tenía que resolverse ante los ticos de Miguel Herrera.

Conforme a lo que presentó Javier Aguirre en el cuadro inicial de este cotejo, está claro que sigue sin encontrarle a su ataque, porque si bien el único fijo sigue siendo Raúl Jiménez, ahora optó porque Alexis Vega y Roberto Alvarado fueran por los costados, mientras que sorprendió con que Marcel Ruiz jugara con funciones de volante ofensivo, mientras que en el mediocampo Luis Chávez acompañó a Edson Álvarez.

Además, también intentó tener más profundidad por izquierda con la entrada de Mateo Chávez en lugar de Jesús Gallardo.

El Tri comenzó muy bien este cotejo, de hecho, se puede decir que los primeros 15 a 20 minutos ante los costarricenses, fueron hasta ese momento de lo mejor del combinado nacional en el torneo.

Buena circulación, manejo de la pelota, asociación y propuesta ofensiva, fueron los argumentos que el Tri mostró en los primeros lapsos del cotejo, quitándole el esférico al rival y llevándolo hacia su línea defensiva, donde el equipo tico resistió.

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Sobre todo se vio bien la banda de la izquierda, con un Mateo Chávez que muestra mucha presencia ofensiva, combinándose con Alexis Vega; no así la banda de la derecha, en la que Roberto Alvarado sigue sin demostrar.

México fue varias veces al ataque y en la parte inicial, se quedó dos veces muy cerca de abrir el marcador, ambas por medio de Raúl Jiménez.

En la primera, el arma predilecta del Tri en esta Copa Oro: la pelota parada. Tiro de esquina desde la punta de la izquierda, Raúl se adelantó a primer poste y remató de cabeza, pero el arquero Keylor Navas le sacó el esférico.

Si esa acción había sido ya de por sí muy importante, la que vino fue espectacular tanto de Raúl como del propio Keylor. Jiménez se fabricó una volea de crack en la media luna del área y puso la pelota en el ángulo, pero el ex guardameta multicampeón con el Real Madrid, se mandó un atajadón digno del mejor futbolista costarricense de todos los tiempos.

Se sentía inminente el gol mexicano, pero una vez más le volvió a suceder lo que ya cada vez es más recurrente en este equipo de Aguirre: tiene picos muy altos en los que no marca diferencia en el marcador y luego vienen los errores defensivos.

Mismos que casi le cuestan que Costa Rica abriera el marcador, ya pasados los treinta minutos de la parte inicial; en el primero, César Montes se equivocó en medir una pelota, el esférico pasó a zona de peligro y de no ser por la mala definición tica, Luis Ángel Malagón ya había salido a la desesperada.

Posteriormente, un error de Jorge Sánchez, habitual en las pifias defensivas, le permitió a Costa Rica tomar de nueva cuenta mal parada a la defensa mexicana, pero afortunadamente volvieron tiempo; al final de esa jugada, Jorge le reclamó a César Montes, por un mal pase y los centroamericanos poco a poco avanzaron metros en el campo.

Para fortuna de México, los errores no le costaron goles por lo que el primer tiempo terminó sin anotaciones, entre que no aprovechó los minutos en los que fue muy superior en el campo y luego cuando baja dramáticamente en zona defensiva.

El segundo tiempo inició con los mismos hombres en ambos equipos; ni Aguirre ni el “Piojo” quisieron moverle tan pronto a sus escuadras.

Diez minutos dentro del segundo tiempo y México tuvo una nueva muy clara de gol, otra vez de Raúl Jiménez, luego de un buen contragolpe. Sin embargo, tras el buen centro del “Piojo” Alvarado, el goleador mexicano falló terriblemente su cabezazo, el cual tenía a placer.

El juego siguió su curso y el gol mexicano no llegaba por lo que al 69′, Aguirre sacó a Raúl Jiménez para meter a Santiago Giménez, a ver si él sí traía los goles.

Dos minutos antes del cambio, Costa Rica reventó el travesaño con un disparo de Alonso Martínez, al cual el arquero Malagón ya no llegaba pese al vuelo.

También entraron César “Chino” Huerta y Charly Rodríguez, para cambiarle la cara al aparato ofensivo mexicano en los últimos 15 minutos del encuentro.

El último en ingresar fue Julián Quiñones, con la idea de aprovechar su velocidad y encontrar en una la conexión con Santiago Giménez.

Los últimos minutos ninguno de los dos equipos realmente tuvo una clara de peligro, ya que la pelota se peleaba mucho en el mediocampo, si bien México tenía más dominio del esférico.

Aparte de eso, Miguel Herrera echó para atrás a su equipo, ya para asegurar el empate, si bien con eso no le alcanzaba para ganar el primer lugar del grupo.

Sin embargo, justo en el último minuto, una jugada a balón parado, terminó con un golazo de Santiago Giménez de tijera dentro del área, con un riflazo que el arquero Keylor Navas no pudo detener.

Parecía que México se llevaría la victoria de manera agónica y nueve puntos en la fase de grupos, pero al árbitro central, Mario Escobar de Guatemala, le hablaron del VAR y ahí encontró un muy polémico fuera de lugar del delantero del AC Milan, porque remató luego de que un defensor costarricense quiso rechazar el esférico.

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El Tri no aprovechó los 15 a 20 minutos del primer tiempo en el que fue claramente superior, para poder marcar la diferencia y terminó por irse sin anotaciones, en un encuentro que bien pudo ganar para cerrar con paso perfecto la fase de grupos.

Por el contrario, la Selección Mexicana culminó una primera etapa de la Copa Oro con muchos más dudas que certezas; más oscuros que claros y sin el futbol que se esperaba en un equipo que vino a este torneo para confirmar que su lugar en Concacaf lo ha retomado, además del bicampeonato.

Ahora, comenzarán los cuartos de final y deberá en Glendale, Arizona, superar a un equipo Saudí que vino a la Copa Oro de invitado y que terminó como segundo lugar del Grupo D.

Ahí comenzarán los partidos a matar o morir para México en este certamen, en el que debe mostrar muchísimos mejores conceptos si es que quiere repetir la corona.