PATRICIA RAMIREZ
Los microsismos que se han registrado en los últimos días en algunas zonas de la Ciudad de México no representan riesgo alguno para la población ni para las edificaciones, informaron autoridades del gobierno capitalino y especialistas.
Expertos del Sistema Sismológico Nacional y del Centro de Geología de la UNAM, explicaron que estos eventos están asociados a la activación de pequeñas fallas pertenecientes a la Sierra de las Cruces, formación que separa al Valle de México del Valle de Toluca.
Estos microsismos, que ocurren ocasionalmente en el Valle de México, suelen presentar magnitudes pequeñas, menores a 3.8, y pueden generar aceleraciones que los hacen perceptibles solamente en las zonas próximas al epicentro.
Asimismo, recordaron que la alerta sísmica no se activa con sismos originados en el Valle de México, pues el sistema está diseñado para alertar de sismos lejanos y aclararon que estos eventos no provienen de alguna actividad humana.
La Ciudad de México actualmente está monitoreada a través de una red de más de 170 estaciones de registro sísmico que transmiten datos en tiempo real hasta las instalaciones del SSN y del Instituto de Ingeniería, permitiendo el registro de sismos en toda la ciudad.
Los más recientes microsismos ocurridos los días 20 y 21 de abril, los cuales, informaron fueron de baja magnitud y aceleraciones significativamente bajas sin representar riesgo alguno para la población ni para las edificaciones de la Ciudad.
El primer microsismo ocurrió el día 20 de abril del 2023 a las 15:04:25 y su epicentro se localizó en el límite entre las alcaldías Benito Juárez y Álvaro Obregón, muy cerca del cruce de las avenidas Barranca del Muerto y Revolución. El SSN estimó una magnitud de 2.6 con profundidad 1.5 km y fue percibido en algunas colonias de las alcaldías Álvaro Obregón, Miguel Hidalgo, Magdalena Contreras, Benito Juárez y Coyoacán.
El segundo microsismo ocurrió el día 21 de abril del 2023 a las 10:39:56 y su epicentro se localizó en una zona próxima del microsismo del 20 de abril. Tuvo una magnitud de 1.8 con profundidad de 1 km, y fue percibido en colonias de las alcaldías Álvaro Obregón, Benito Juárez y Coyoacán.
Estos microsismos se encuentran en una región próxima a una secuencia de eventos similares ocurridos en 1981 en la zona de Mixcoac.