Juan Ramón de la Fuente. Foto: EFE El canciller Juan Ramón de la Fuente sostuvo que el Servicio Exterior Mexicano requiere una revisión profunda de su ley y de su reglamento para actualizarse frente a un mundo más complejo y advirtió que la longevidad institucional carecería de sentido sin un proceso permanente de renovación que preserve la tradición sin sacrificar eficiencia, coherencia y claridad en las responsabilidades del cuerpo diplomático.
“Debemos considerar muy seriamente una revisión a fondo a la ley del Servicio Exterior Mexicano y a su reglamento para actualizarlo, para darle mayor vigencia y para que esa riquísima tradición que tiene no se vaya diluyendo en el tiempo por falta de una revisión y de una actualización que creo que es muy pertinente”, dijo.
Durante un encuentro con personal con 25 años de servicio y de nuevo ingreso, De la Fuente afirmó que el derecho de asilo debe mantenerse como principio irrenunciable de la política exterior y recordó que la tradición mexicana fue reconocida por diversos países de América Latina, lo cual obliga a defender la Convención de Caracas de 1954 y a sostener una posición firme ante cuestionamientos que pretendan debilitar un componente esencial de la identidad diplomática del país.
“Vamos a seguir defendiendo aquellos derechos que México ha considerado y considera como irrenunciables, por ser justos y por estar inscritos en nuestro marco jurídico y el marco jurídico internacional”, aseveró el canciller.
Explicó que la política exterior feminista constituye un componente central del cambio institucional y señaló que la dependencia impulsa condiciones de equidad en ascensos, eliminación de violencia y apertura de espacios donde las mujeres puedan participar en puestos de decisión, como parte de una estrategia para corregir desequilibrios históricos dentro del Servicio Exterior Mexicano.
El canciller señaló que la diplomacia económica forma parte de las nuevas exigencias de la carrera y explicó que los representantes en el exterior deberán atraer inversión, facilitar exportaciones y fortalecer oportunidades para productos mexicanos, porque esta vertiente incide en el desarrollo nacional y en los esfuerzos para reducir desigualdades mediante la apertura de nuevos mercados.
México promoverá una reforma del multilateralismo para acelerar respuestas ante crisis internacionales, afirmó, debido a que los mecanismos actuales tardan meses o años en ejecutar decisiones que impactan la vida de miles de personas, y planteó que la propuesta mexicana buscará detonar un debate que permita fortalecer la eficacia del Sistema de Naciones Unidas.
El funcionario anunció que en los próximos días se emitirán dos convocatorias de ascenso para las ramas diplomática, consular y técnica administrativa y precisó que más de 200 integrantes del Servicio Exterior podrán avanzar mediante una acción afirmativa orientada a impulsar equidad de género y consolidar una estructura más equilibrada en las representaciones mexicanas.
