Sergio E. Contreras Pérez, presidente ejecutivo del Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce), destacó la necesidad de fortalecer a la Alianza del Pacífico, y al mismo tiempo, la relación empresarial con los gobiernos de México, Chile, Colombia y Perú.

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“Desde el Comce hemos trabajado activamente en iniciativas digitales, la armonización regulatoria en sectores estratégicos y el impulso a las cadenas de valor compartidas”, dijo durante la XI Cumbre Empresarial de este mecanismo.

Reiteró la importancia de consolidar la adhesión de Costa Rica a la Alianza del Pacífico, lo que ampliaría las oportunidades económicas y fortalecería la integración regional, e identificó medidas prioritarias para el fortalecimiento de la Alianza del Pacífico.

En este tenor, y ante 250 líderes empresariales, Contreras Pérez señaló la necesidad de poner en marcha la Agencia de Economía Circular de la Alianza del Pacífico, creando un espacio permanente de diálogo y reflexión entre los sectores público y privado, la academia y los organismos internacionales, enfocado en identificar y reconocer buenas prácticas.

También, implementar los anexos de armonización regulatoria, por lo que los gobiernos deben avanzar en la implementación de los anexos de aseo doméstico, dispositivos médicos, productos cosméticos y contar con una mayor sostenibilidad sanitaria, avanzando en el anexo del sector farmacéutico e iniciando negociaciones en los sectores alimentos procesados y bebidas.

El organismo considera necesario aprovechar el potencial del nearshoring, posicionado al bloque como un destino preferente para la inversión extranjera, aprovechando la reconfiguración de las cadenas de suministro globales. “México, con su ubicación estratégica y experiencia en manufactura avanzada, puede ser un catalizador clave en esta estrategia”.

Y observa la necesidad de fomentar la colaboración público-privada, estableciendo mesas de trabajo conjuntas que prioricen áreas clave como la sostenibilidad, la innovación y el fortalecimiento de cadenas de valor compartidas; “la cooperación entre gobiernos y empresas es fundamental para implementar políticas que impulsen estas áreas”.