Niega gobierno fusilamiento y dice que fue una refriega

2, marzo 2022

La masacre de San José de Gracia, Michoacán, no fue un fusilamiento sino un enfrentamiento por una venganza personal entre dos líderes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), aseguró ayer el subsecretario de Seguridad federal, Ricardo Mejía Berdeja.

El grupo agresor se dio el lujo de limpiar la escena del crimen y llevarse los restos humanos en forma inmediata, inhumados en fosas clandestinas, de las cuales ya hay denuncias anónimas sobre su ubicación.

Durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador escuchó del subsecretario de Seguridad federal, Ricardo Mejía Berdeja, una narración de cómo ocurrieron los hechos del pasado domingo, entre las 15:30 y las 16:00 horas.

El subsecretario indicó que la masacre se conoció por un reporte de la Fiscalía local, debido a que “no hubo un alertamiento por parte de la autoridad municipal”.

Con las primeras testimoniales se estableció que todo se debió a diferencias personales entre Alejandro N El Pelón y Abel N ‘El Toro’ o ‘El Viejón’, ambos originarios del municipio de San José de Gracia, Michoacán.

Los dos integrantes de la organización Caballeros Templarios y después del Cártel Jalisco Nueva Generación.

Alejandro N El Pelón, quien primero fue Z, después integrante de La Familia Michoacana, Caballero Templario y finalmente miembro del CJNG operaba como jefe de plaza en Mazamitla, pero fue detenido por la policía.

Mientras estuvo en prisión fue relevado por Abel N, quien ordenó la ejecución del hermano de Alejandro de nombre Ricardo N después de una riña en una cantina.

Al salir de la cárcel Alejandro N quiso recuperar el control de la plaza de San José de Gracia, pero fue advertido de que ya no volviera a pararse por ahí o sería ejecutado, pese a que en el pueblo vivía su madre y familia.

Alejandro N se incorporó al CJNG, pero con funciones específicas en Jalisco y Colima, desde donde se encargó de asesinar a José N hermano de Abel N en venganza de lo que habían hecho con su hermano Ricardo, lo que incrementó la rivalidad.

A sabiendas de que estaba sentenciado de muerte, el pasado domingo, Alejandro N El Pelón acudió al funeral de su madre y se acompañó de 15 hombres fuertemente armados en varias camionetas de color blanco.

Alejandro N El Pelón al llegar a San José de Gracia, argumentó que ya tenía permiso y podía acudir al funeral. Esta acción, incluso fue reclamada por su familia ante el inminente riesgo de un enfrentamiento pues estaba sentenciado por Abel N El Toro o El Viejón desde 2021.

Tan pronto llegó Alejandro al velorio sicarios comandados por Abel N El Viejón, rodearon la zona y la carpa donde se celebraba el funeral, dijo el subsecretario.

“Los desarman y los colocan afuera de una casa, como aparece en los videos, revisan los vehículos y los repliegan enfrente de un portón”, añadió el funcionario.

“La declaración ministerial señala que Alejandro estaba haciendo llamadas, se comenta que para decir que el grupo de Abel N se retirara del lugar; no obstante, no hay respuesta y se acerca al otro grupo, pidiendo que no accionen contra terceros y tratando de disuadir.

Al no recibir respuesta telefónica y no poder convencer al grupo de Abel N, éste mismo fue quien disparó primero contra Alejandro “N” privándolo de la vida, como aparece en el video difundido por redes sociales.

“En ese momento, se origina una refriega donde hay otras personas privadas de la vida”, balacera registrada en video, una vez que los escoltas de Alejandro “N” ya estaban desarmados, sostuvo el funcionario.

Confirmó que al llegar las autoridades ministeriales y federales “se muestran restos de sangre que, aunque se trataron de borrar con agua, quedaron vestigios. Los sujetos arriban al lugar de los hechos con el instrumental para inyectar agua, lo cual es totalmente atípico, se va a investigar. Llama la atención de Abel N que haya inmediatamente tratado de recoger los cuerpos.

“No podemos confirmar el número porque no hay cuerpos. De entrada, hay un cuerpo que se atribuye a Alejandro N, El Pelón, y presumiblemente algunos de sus acompañantes. No podemos decir una cifra, pero de los indicios podemos advertir lesiones, huellas hemáticas, balas percutidas y se va a seguir investigando”, expuso.

“Este es el lugar donde estaban colocadas las personas, estos son los indicios de algunos impactos de arma de fuego, no se puede apreciar que haya habido una sola línea; es decir, esa tesis del supuesto fusilamiento.