URBANO BARRERA

A ocho años de la desaparición forzada de los 43 jóvenes normalistas de Ayotzinapa, “no hay indicios de que estén vivos”, reportó el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez.

“Se han recuperado más de mil indicios, que junto con material genético, se ha enviado a instituciones internacionales, pero no se ha logrado la identificación de algún estudiante”, reconoció.

Aún más, en los ocho años de indagatorias han sido ejecutados, “levantados” y desaparecido 26 testigos clave que habrían podido aportar información.

Entre este grupo figuran integrantes de la delincuencia organizada y servidores públicos que conocieron de los hechos ocurridos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014.

El subsecretario de Derechos Humanos, al rendir un informe tras una reunión con los padres, madres y representantes de los normalistas,explicó que peritos especialistas han recuperado más de mil indicios, que junto con material genético, se ha enviado a instituciones internacionales, pero no se ha logrado la identificación de algún estudiante.

También señaló que se tiene documentado que tras los hechos, un soldado proporcionó informes de la movilización de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

Sin embargo, el militar desapareció junto con los jóvenes, sin obtenerse ningún dato de él.

Destacó que sus mandos no activaron el protocolo de búsqueda de efectivos desaparecidos y con ello se perdió información importante.

Aseguró que la desaparición forzada de los 43 jóvenes fue un crimen de estado entre Guerreros Unidos y agentes del Estado Mexicano. Con lo que hasta hoy “no hay indicios de que los normalistas estén vivos“.

Entre los ejecutados destaca Juan Salgado Guzmán, conocido como “El Indio” en la organización criminal Guerreros Unidos.

El jueves 23 de septiembre de 2021, mientras circulaba en un taxi en las calles céntricas de Metepec, Estado de México, fue masacrado con más de veinte balazos.

Las personas responsables de esta muerte eran funcionarios públicos adscritos a la Fiscalía General de la República.

Ante el Ministerio Público argumentaron que accionaron sus armas en defensa propia, debido a que Salgado Guzmán los agredió.

El 2 de agosto perdió la vida Mario Brito, otro integrante de Guerreros Unidos.

Este sujeto estaría cuando se dieron los hechos de Iguala, Guerrero.

Al igual que a estas dos personas se interceptó a otras 18 y se les asesinó para borrar huellas del caso y que se conociera la verdad.

Están en la lista servidores públicos que participarían en las etapas iniciales de la investigación.

En la reunión con los padres de los jóvenes de Ayotzinapa estuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador, el fiscal general de la República, integrantes de la Secretaría de Gobernación y expertos internacionales y los padres, así como familiares de los normalistas.

Alrededor de las 11 de la mañana llegaron los padres y madres de los normalistas, trasladados por un autobús.