GABY SALIDO
Con el aumento de la población mundial, muchas ciudades y manchas urbanas crecieron, provocando en muchos casos desarrollo urbano desmedido y sin planeación.
En muchos países, el ingenio de las familias para tener una vivienda y la improvisación de las autoridades, provocaron desigualdades, carencias y brechas en el desarrollo social.
A fin de mejorar la calidad de vida de las personas, desarrollos sostenibles y ciudades amigables con el medio ambiente, surgió el Programa de la ONU para los Asentamientos Humanos.
Mientras el mundo buscaba beneficios gracias la urbanización, el entonces Distrito Federal, no contaba con normas propias para el ordenamiento territorial.
Sin lugar a dudas, eso provocó mayor desequilibrio en el desarrollo urbano, y sobre explotación de recursos, comprometiendo en diversas zonas la prestación de servicios públicos.
Aunque la preocupación por lograr ciudades habitables y el nacimiento de la CDMX, surgieron prácticamente al mismo tiempo, 37 años después, y sin haber resuelto esos conflictos, la CDMX vive nuevos retos que no son menores.
Para hacerles frente, nuestra Constitución creó el Instituto de Planeación y reconoció el derecho a una Ciudad Habitable.
Sin la autonomía esperada, trabajo acotado, decisiones cuestionadas por la ciudadanía, sometido -incluso en instalaciones- a la SEDUVI, el Instituto de Planeación vive su “Octubre Urbano”.
Se preguntarán ¿Por qué “Octubre Urbano”? La ONU llama así a 31 días de actividades para generar conciencia y lograr mejores ciudades. Comenzando el primer lunes del mes con el “Día Mundial del Hábitat”, y cierra el “Día mundial de las Ciudades”.
En ese contexto, el Instituto de Planeación tiene obstáculos que superar antes de proyectar el desarrollo de la CDMX a 15 años: la elección de su nueva titular y conformar todos sus órganos de gobierno.
Lamentablemente, ni siquiera va contra reloj, pues el tiempo para que sean vigentes los instrumentos ya venció, y se acerca el turno de los Programas de Alcaldías.
Para colmo de los males, ahora tendrá que compartir un tema más con SEDUVI, y me refiero a la autoría de “Fundamentos Legales” y “Diagnóstico” del Programa General de Ordenamiento Territorial que envío con la Jefa de Gobierno a este Congreso desde el mes de julio.
Pues como dato curioso, el mismo texto se replica ocupando poco más del 14% del Informe que apenas hace unos días mandó SEDUVI, incluso señala datos: “antes de la aprobación del Programa de Ordenamiento Territorial”
¿Quién hizo la tarea de quién?
Para saberlo, muchos temas y materias deben ser objeto de cuestionamientos por parte de diputadas y diputados que integran 4 de las comisiones del Congreso, ante quienes comparecerá SEDUVI, dependencia que, lejos de traspasar facultades al Instituto, centraliza y se hace cargo de otras.
