El alcalde de Cuajimalpa, Carlos Orvañanos, hizo un llamado “urgente” a los titulares de las alcaldías y a los gobiernos central y federal para conformar un frente común contra la delincuencia.
El pronunciamiento se dio en el marco del pase de lista a elementos de la policía de la demarcación, donde afirmó que la estrategia local se basa en la prevención del delito y en el contacto permanente con la población para atender y reaccionar de manera inmediata ante hechos criminales.
En ese contexto, advirtió que en la demarcación no habrá tolerancia al crimen, al afirmar que “aquí no vamos a permitir que los delincuentes se apropien de nuestra demarcación, cuenten con este gobierno para protegerlos, porque aquí en Cuajimalpa le decimos a los que buscan hacer daño: aquí no hay cabida ni tolerancia a fechorías”, señaló.
Orvañanos destacó que ceremonias como el pase de lista no sólo representan disciplina, sino también un recordatorio de la responsabilidad que los policías asumen al portar el uniforme.
“Cada vez que se ponen este uniforme, asumen un compromiso que va más allá de un simple trabajo: cuidar a la población”, afirmó.
Durante la ceremonia, reconoció la labor de vigilancia, honestidad y compromiso de ocho elementos, e instó al resto de la corporación a no bajar la guardia.
“Su único objetivo es lastimar a nuestras comunidades, por eso estamos día a día trabajando en darles las herramientas necesarias para que cumplan con su deber: mejor equipamiento, más capacitación y un respaldo absoluto”, dijo.
El alcalde recordó que la policía de Cuajimalpa cuenta con todo el apoyo de su gobierno y con el respaldo ciudadano.
“Tenemos una policía de resultados, honesta y que no se deja de los malos; es el resultado de su trabajo incansable y de su compromiso. Los invito a que sigan por este camino”, expresó.
Asimismo, afirmó que durante sus recorridos los vecinos reconocen la política de seguridad de la demarcación, por lo que hizo un llamado a los agentes a conducirse con ética y vocación de servicio.
“En cada llamada de emergencia, en cada interacción con un ciudadano, actúen con la más alta ética y la convicción de que están al servicio de su comunidad”, indicó.
Orvañanos dijo que el uniforme y la placa son símbolos de autoridad, pero también un recordatorio de que ese poder debe ejercerse con humanidad, respeto e integridad.




