Foto: Cuartoscuro.com Acción Nacional advirtió que el nuevo Poder Judicial tendrá que demostrar si defenderá los derechos ciudadanos o se alineará con el poder político, al tiempo que subrayó que la reforma carece de legitimidad de origen.
En vísperas de la instalación del periodo ordinario de sesiones, el PAN anunció que estará “vigilante” de sus primeras resoluciones, en un contexto marcado por el resguardo de la sede del Senado y el cuestionamiento opositor al proceso.
En conferencia de prensa realizada en el Senado de la República, durante la sesión plenaria de su grupo parlamentario y con las instalaciones resguardadas con miras a la ceremonia del 1 de septiembre para tomar protesta a los nuevos integrantes del poder judicial, el coordinador Ricardo Anaya Cortés y el presidente del Comité Ejecutivo Nacional, Jorge Romero Herrera, coincidieron en señalar que la reforma judicial no responde a la demanda ciudadana de agilizar la justicia ni de fortalecer la independencia del Poder Judicial, sino que fue concebida como un mecanismo de control político.
Jorge Romero Herrera recordó que Acción Nacional interpuso miles de amparos contra las llamadas “leyes espía” y una acción de inconstitucionalidad contra la “Ley Censura” en Puebla, ambos casos que deberán ser resueltos por la nueva Suprema Corte y tribunales. “¿Qué va a hacer el nuevo Poder Judicial? ¿Va a garantizar los derechos o va a congraciarse con el poder? Ahí se va a definir“, sostuvo.
Aseguró que el PAN no prejuzgará a los nuevos ministros y magistrados, pero insistió en que la elección judicial fue un proceso cuestionado que no otorgó legitimidad de origen.
“Pueden lograr una legitimación posterior si en el ejercicio de su encargo cumplen con la ley. Si lo hacen, tendrán el reconocimiento de millones de personas; si no, Acción Nacional los señalará como lo hemos hecho frente a cualquier autoritarismo“, afirmó Jorge Romero Herrera.
El dirigente panista en cuanto a la agenda legislativa que impulsará el Grupo Parlamentario en el próximo periodo, adelantó que su partido se centrará en tres ejes: salud, economía y seguridad.
También señaló que el PAN está dispuesto a debatir sobre la prisión preventiva oficiosa en el marco de las leyes secundarias de la reforma judicial, pero advirtió que “el problema es cuando ni siquiera al diálogo te invitan“.
En relación con el operativo de seguridad en torno al Senado, Jorge Romero Herrera consideró que refleja la tensión política con la que se llevará a cabo la sesión del 1 de septiembre. Por su parte, Ricardo Anaya Cortés fue más contundente al calificar el cerco como un “síntoma del temor que tiene el régimen” ante la reacción ciudadana frente a lo que consideró un proceso fraudulento.
“Miren, me parece que es un síntoma del temor que tiene Morena de que haya reacciones en contra de algo que a todas luces ha sido ilegal y fraudulento. ¿Cómo construyeron la mayoría calificada?, ¿cómo obtuvieron el voto que les faltaba para pasar la reforma judicial? No fue en las urnas, fue a punta de órdenes de aprehensión“, dijo.
