Las fuerzas del orden interceptaron este lunes en los alrededores de Houston, Texas, a dos de los diez internos evadidos de un centro penitenciario de Nueva Orleans, Luisiana el pasado viernes 16 de mayo.

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De manera simultánea, otro prófugo fue detenido en Baton Rouge, una localidad luisiana de 220,000 residentes, según confirmó oficialmente la procuradora estatal Liz Murrill mediante una declaración en su perfil de Facebook.

Con estas detenciones, las primeras realizadas fuera de Nueva Orleans, únicamente dos criminales permanecen en libertad.

“Trabajo excepcional de la Policía Estatal de Luisiana y el Departamento de Seguridad Pública de Texas. Antoine y Derrick son los próximos objetivos”, declaró en su cuenta de X el gobernador Jeff Landry, sin brindar información adicional.

Según los reportes disponibles, las autoridades de Baton Rouge fueron notificadas sobre la posible presencia del recluso recapturado en la urbe y arrestaron a un individuo que portaba una mascarilla. Actualmente se está ejecutando una orden de cateo en el establecimiento hotelero donde se hospedaba, informaron medios informativos locales.

Estos tres evadidos pertenecían al conjunto de diez varones, de edades entre 20 y 42 años, que se fugaron a medianoche del viernes 16 de mayo a través de un orificio ubicado detrás de un sanitario del Centro de Justicia de Nueva Orleans. Sin embargo, tres fueron capturados inmediatamente y posteriormente se arrestó a dos más en operaciones separadas.

Adicionalmente, un empleado de mantenimiento carcelario también fue arrestado y acusado de facilitar la evasión de los presidiarios.

El trabajador confesó a las autoridades que uno de los fugitivos le solicitó que suspendiera el suministro hídrico de la celda desde donde escaparon los reclusos. En lugar de reportar al interno, el empleado siguió las instrucciones, lo que posibilitó la fuga.

Los evadidos cumplían sentencias por homicidio y agresión con arma de fuego y podrían estar armados, informó oportunamente el fiscal del distrito de la Parroquia de Orleans, Jason Williams, quien advirtió que varios integrantes de su equipo “ya abandonaron la ciudad” por temor a venganzas.

Las autoridades ofrecen una recompensa de 20,000 dólares por información que conduzca a la recaptura de los dos reos aún fugitivos.