El gran drama del mercado invernal no termina por cerrar su último capítulo. Jesús Orozco Chiquete le ha dado definitivamente la espalda a las Chivas, que ante la traición de su canterano, ha tomado una postura sumamente estricta y no ceder ni una sola concesión.

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Es sabido que el defensor de 22 años tiene un acuerdo de palabra con la directiva celeste encabezada por Iván Alonso, por lo que La Máquina solo debe pagar la cláusula de rescisión Nara poder hacer efectiva su adquisición de cara al torneo Clausura 2025 de la Liga MX. Pero al no haber realizado aún el depósito por el jugador y ante la pésima actitud del mismo, Guadalajara decidió enviarlo de momento al Tapatío o a la Sub-23.

Chiquete se presentó a entrenar al redil, luego de haber dado positivo por chikungunya, razón por la que no asistió a la pretemporada del equipo en Zacatecas y elevó las versiones sobre el rompimiento.

La situación se ha enfriado debido a que el Rebaño Sagrado habría puesto como condición a los cementeros para concederle a Chiquete su salida hacia La Noria, el pago en una sola muestra de la cláusula de rescisión de 11 millones de dólares, toda vez que Cruz Azul desearía cubrir la cantidad en parcialidades.

Es tal el desencanto del chiverío con su jugador que ante la pasividad de Cruz Azul, buscarían obligar al central a fichar por otro equipo interesado en sus servicios como es el Monterrey, que entró a la puja por el zaguero en las últimas horas, y a diferencia de Cruz Azul están dispuestos a pagar los 11 millones de billetes verdes en una sola exhibición, lo que serviría al club más querido de México a poderse lanzarse por Luis Chávez y Orbelín Pineda.