Queda otra vez el TEPJF incompleto, con la salida de Janine Otálora

Se despide también Mónica Soto de la presidencia de la Sala Superior y dice que esta vez la transición será ordenada y transparente.



Foto: Cuartoscuro.com

La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) despidió a la magistrada Janine Otálora Malassis, quien dejó su cargo después de 9 años en el órgano jurisdiccional, tras no aceptar ampliar su periodo hasta 2027, como se estableció en la reforma judicial, con lo que nuevamente el pleno queda incompleto, con solo seis integrantes.

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Al inicio de la sesión de este jueves, la presidenta del Tribunal, Mónica Soto Fregoso, también se despidió de ese cargo, pues a partir del 1 de noviembre asume la presidencia el magistrado Gilberto de Guzmán Bátiz, quien fue el más votado en las elecciones judiciales.

Soto Fregoso hizo un reconocimiento al trabajo de la magistrada Otálora, destacando su trayectoria, fortaleza y firmeza en sus decisiones, “a veces compartidas y a veces no, pero siempre válidas y constitucionales”.

Entre aplausos y reconocimiento de sus colaboradoras, y con la magistrada saliente visiblemente emocionada, Soto subrayó que “se cierran ciclos y se abren nuevos caminos.”

“Hay muchos caminos por andar y estoy segura de que los suyos están ahí para seguir fortaleciendo lo que usted considere y donde usted considere seguir aportando a México, a nuestra democracia y también, por qué no, a nuestra institución, desde otra posición, como exmagistrada de esta Sala Superior”, expresó.

Asimismo, la todavía presidenta señaló que por primera vez en nueve años, este 1 de noviembre habrá una transición ordenada, institucional y transparente, asegurando la continuidad del trabajo jurisdiccional y administrativo en beneficio de la justicia electoral y de la ciudadanía.

“Más allá de los desafíos, logramos consolidar un tribunal fuerte, un tribunal como referente nacional y un firme garante de los derechos político-electorales”, afirmó, al considerar que esta transición representa una oportunidad para renovar el compromiso con la justicia electoral, la ciudadanía y los valores democráticos.

Finalmente, Soto destacó que el TEPJF es una institución fuerte, consolidada y unida en favor de la justicia electoral, y expresó su confianza en que el magistrado Bátiz ejercerá su encomienda con integridad, firmeza y sensibilidad, guiado por los más altos estándares de exigencia profesional.