Por Guillermo Deloya Cobián
En la tierra del apóstol Santiago, al igual que en 14 entidades más en la república se renovará el poder ejecutivo del estado el próximo 6 de junio. De tal manera, diez candidatos buscarán relevar en el encargo a Francisco Domínguez Servién en una contienda electoral que a pocos días de la cita definitiva parece tomar rumbos en las preferencias. Una elección con una connotación de importancia real que literalmente nos ubica en el centro del país. De hecho, Tequisquiapan se considera el centro geográfico de la república mexicana. Pero no podría ser distinto en razón de la importancia que detenta este estado; una entidad aportadora de casi el 3% del Producto Interno Bruto, donde se reparte una población de 2’368,467 personas. Aquí, donde mayoritariamente esa población se ubica en asentamientos de tipo urbano en un 80%, los queretanos elegirán a 18 presidentes municipales con sus correspondientes sindicaturas más 148 regidurías, tendrán que optar entre las opciones existentes por 8 diputados federales mas 25 diputados locales de los cuales 15 corresponden a mayoría relativa y 10 mas a representación proporcional. Y llama la atención la elección en municipios donde se encuentra la mayor concentración poblacional votante. Tal es el caso de la capital, Santiago de Querétaro, Corregidora, Tequisquiapan y el Marqués, municipios que concentran más del 70% de la lista nominal.
La competencia se desarrolla ya en una recta final que tiene protagonistas reconocidos. En primer lugar, Mauricio Kuri, de cepa panista ahora compite con grandes posibilidades de suceder a Domínguez Servién. De corte empresarial, y con decidido apoyo de las cámaras de las cuales fue miembro y directivo como la CANACO y la COPARMEX en el estado, estará en la boleta para justificar su intención. Licenciado en Derecho por la UVM quien ha tenido trayectoria tanto en sector público como privado. En el primer caso, como presidente municipal de corregidora hasta 2017 y actualmente senador con licencia. En su camino por el sector privado, ha instalado diversas empresas en el estado, además de participar en consejos consultivos de otras tantas. Este caso de candidatura hay que prestarle atención ya que el ataque constante de los adversarios políticos lo ha puesto en la mira de las denuncias por incurrir en gastos excesivos de campaña, muchas de ellas aún en proceso de ser resueltas. Lo cierto es que Kuri, de 51 años parece tener un paso firme en la recta final hacia el voto. En otro casillero, tratando de cerrar la brecha se encuentra Celia Maya García, mujer sólidamente edificada en las credenciales académicas al ser abogada por la UAQ, maestra y doctora en derecho quien además cuenta con una segunda carrera en contabilidad y administración y una tercera maestría en derecho procesal penal misma que realizó en Puebla. Con una trayectoria destacable en el ramo de procuración y administración de justicia en su carrera pública, llegó incluso a formar parte de la terna que este gobierno federal propusiera para ocupar aquel lugar vacante en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Proveniente de la izquierda perredista, la doctora busca un triunfo electoral que se le ha negado en dos ocasiones pasadas en 2003 y 2015. Una tercera contendiente quien se rezaga en este final de contienda es la candidata del PRI Abigail Arredondo, mujer joven con experiencia partidista y legislativa como diputada local y regidora. Licenciada en ciencias políticas de la UAQ quien busca conseguir una participación digna en esta elección. Otros candidatos son: Penélope Ramírez del PT, María de Jesús Ibarra del PT, Juan Carlos Martínez de Fuerza por México, Katia Reséndiz del Verde, Raquel Ruíz del PRD y Miguel Nava de Redes Sociales Progresistas.
Debemos tener claro que esta entidad federativa, solo ha conocido la alternancia oscilante en el bipartidismo priista y panista. Por otra parte, el interés que se tiene puesto sobre el estado se incrementa en razón de la relevancia que el mismo ha tomado en los últimos 20 años en el mapa económico mexicano. Incluso, en razón de su riqueza productiva, por varios años estuvo considerada como la entidad con las mejores condiciones en cuanto a calidad de vida. La migración hacia este punto del centro-norte del país, ha sido una constante desde los años noventa ante la oportunidad laboral que para muchos representó. El asentamiento de empresas e industrias, permitieron que población proveniente de San Luis Potosí, Estado de México, Guanajuato y Michoacán, encontraran en Querétaro un mejor destino de vida. Lo anterior, por igual ha convertido a este lugar en un crisol pluricultural donde el arraigo a la tierra es cambiante lo cual se puede significar en desinterés por las elecciones locales. Sin embargo, los números indican que la participación en este tipo de elecciones ha incrementado gradualmente, y en los últimos diez años se ha mantenido estable. Esperemos una fiesta democrática en satisfacción de los anhelos de los queretanos.
