La revocación de la expulsión de Enrique Ochoa Reza del Partido Revolucionario Institucional (PRI) representa una defensa institucional del pluralismo y la deliberación interna, principios esenciales en toda organización democrática, afirmó la mayoría de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

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La resolución, aprobada por tres votos contra dos, reconoce que las expresiones de Ochoa Reza, realizadas en un contexto de debate partidario sobre la conducción del PRI y la eventual reelección de su dirigencia nacional, se inscriben dentro de un marco legítimo de crítica interna. Para el tribunal, dichas opiniones no constituyen una falta a la disciplina partidaria ni un acto de deslealtad, sino un ejercicio válido de participación política.

El caso cobra relevancia al enmarcarse en un momento clave para el priismo, que enfrenta el reto de reconstruir consensos y revitalizar su identidad en medio de un entorno electoral cambiante. La sentencia no sólo reinstala a Ochoa Reza como militante, sino que también envía un mensaje claro sobre la necesidad de proteger los espacios de debate dentro de los partidos.

Enrique Ochoa Reza, quien ha ocupado diversos cargos de responsabilidad nacional, fue expulsado por la Comisión Nacional de Justicia Partidaria en 2023. La resolución del TEPJF, de carácter definitiva, anula de forma total dicha sanción y reafirma su derecho a seguir participando en la vida orgánica del partido.

El fallo ha sido interpretado en círculos políticos como un recordatorio sobre la importancia de respetar la diversidad de pensamiento como base para la cohesión partidaria. Hasta el momento, el PRI no ha emitido un pronunciamiento oficial en torno a la resolución.