La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó “categóricamente la calumnia que hizo la Casa Blanca” a su gobierno en el sentido de tener relaciones con organizaciones criminales, así como una intención injerencista en el territorio mexicano.
Al advertir que México no quiere una confrontación, propuso al presidente Donald Trump establecer una mesa de trabajo “con nuestros mejores equipos de seguridad y salud pública”.
Señaló que no es con la imposición de los aranceles como se resuelven los problemas, sino hablando y dialogando “como lo hicimos en estas últimas semanas con su Departamento de Estado para atender el fenómeno de la migración; en nuestro caso, con respeto a los derechos humanos.”
A través de sus redes sociales, donde publicó el mensaje, al resaltar que la gráfica que su homólogo norteamericano ha subido en sus plataformas sociales una gráfica sobre la disminución de la migración fue elaborada por el equipo que tiene la presidenta, informó que instruyó al secretario de Economía, Marcelo Ebrard “para que implemente el plan B que hemos estado trabajando, que incluye medidas arancelarias y no arancelarias en defensa de los intereses de México”.
Sheinbaum Pardo al enfatizar que “nada por la fuerza; todo por la razón y el derecho” aclaró que México no quiere confrontación y que parte de una colaboración entre países vecinos.
“México no solo no quiere que el fentanilo llegue a Estados Unidos, sino a ninguna parte. Por ello, si Estados Unidos quiere combatir a los grupos delictivos que trafican droga y generan violencia, debemos trabajar conjuntamente de forma integral, pero siempre bajo los principios de responsabilidad compartida, confianza mutua, colaboración y, sobre todo, respeto a la soberanía, que no es negociable. Coordinación sí; subordinación, no.”
La presidenta recordó que “si en algún lugar existe tal alianza es en las armerías de los Estados Unidos que venden armas de alto poder a estos grupos criminales, como lo demostró el propio Departamento de Justicia de Estados Unidos en enero de este año”.
Dijo que, a diferencia de Estados Unidos, el gobierno mexicano ha asegurado en cuatro meses más de 40 toneladas de drogas, incluyendo 20 millones de dosis de fentanilo y ha logrado la detención de más de diez mil personas vinculadas con organizaciones criminales.
Sheinbaum Pardo incluso le hizo una recomendación para combatir el consumo de las drogas, principalmente el fentanilo.
“Si el gobierno de Estados Unidos y sus agencias quisieran atender el grave consumo de fentanilo en su país, pueden por ejemplo combatir la venta de estupefacientes en las calles de sus principales ciudades, lo que no hacen y el lavado de dinero que se genera por esta actividad ilegal que tanto daño ha hecho a su población”.
La mandataria le recomendó también iniciar una “campaña masiva para evitar el consumo de estas drogas y cuidar a sus jóvenes, como lo hemos hecho en México”.
Resaltó que el consumo y la distribución de drogas está en Estados Unidos y es un problema de salud pública que la administración norteamericana no ha atendido.
“La epidemia de opioides sintéticos en Estados Unidos, tiene su origen en la prescripción indiscriminada de medicamentos de este tipo, autorizados por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) como lo demuestra el juicio contra una farmacéutica”, resaltó.