La Secretaría de Salud informó que la variante H3N2 subclado K de influenza permaneció bajo vigilancia epidemiológica activa, luego de que se detectó un solo caso confirmado en el país, sin que se identificaran contagios adicionales ni cuadros graves asociados.

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El caso correspondió a una mujer de aproximadamente 80 años de edad, residente de la Ciudad de México, quien cursó la enfermedad de forma ambulatoria, recibió tratamiento con oseltamivir y presentó una evolución favorable, por lo que no requirió hospitalización y se reportó completamente recuperado, informó David Kershenobich, secretario de Salud.

Esta variante, explicó, mostró mayor capacidad de contagio, aunque mantuvo un comportamiento clínico similar a la influenza estacional y respondió de manera adecuada al tratamiento antiviral disponible en el sistema público de salud.

El funcionario precisó que la vacuna contra influenza aplicada en México cubrió esta variante, al tratarse de un subclado incluido en la formulación vigente, preparada con base en la vigilancia epidemiológica internacional y utilizada durante la temporada invernal.

La estrategia sanitaria enfatizó que la vacunación invernal no se limitó a la influenza, sino que incluyó también la aplicación de biológicos contra covid, neumococo y sarampión, como parte de un programa integral de prevención de enfermedades respiratorias.

En el caso de la influenza, la vacunación se dirigió a niñas y niños de cero a cinco años, así como a personas adultas mayores, mientras que la inmunización contra neumococo se enfocó en población de más de 60 años, con una aplicación cada cinco años.

Para sarampión, la campaña de vacunación abarcó a personas desde seis meses hasta 49 años, con un esquema que consideró al menos dos dosis en población infantil, ante la presencia de brotes en distintas regiones.

Las autoridades informaron que la cobertura de vacunación alcanzó aproximadamente 50 por ciento de la población objetivo, por lo que exhortaron a acudir a cualquier centro de salud, sin importar la derechohabiencia, ya que todas las instituciones del sector participaron de manera coordinada.

El IMSS, el IMSS-Bienestar, el ISSSTE y la Secretaría de Salud mantienen brigadas y centros de vacunación fijos y móviles, incluso en zonas rurales y comunidades alejadas, con el objetivo de garantizar el acceso universal a los esquemas preventivos.