El Estadio BBVA, hogar de los Rayados de Monterrey, ha sido objeto de controversia desde su inauguración en 2017. A pesar de ser considerado el estadio más moderno del futbol mexicano, su campo de juego ha sido constantemente cuestionado por jugadores, entrenadores y directivos. Recientemente, Jordi Cortizo, jugador del Monterrey, ha arrojado luz sobre los desafíos que enfrentan los futbolistas en este recinto.

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El problema del césped

Cortizo no escatimó críticas al hablar sobre el estado del campo. Según el jugador, el césped del BBVA es uno de los peores de la Liga MX, comparable solo con el sintético del Estadio Caliente de Tijuana y el del Olímpico Benito Juárez de Ciudad Juárez. El futbolista explicó que parte del problema radica en la falta de exposición al sol y al aire de ciertas zonas del campo, lo que ha llevado a la implementación de un césped híbrido en un intento por mejorar las condiciones, así lo dio a conocer en el podcast de Roberto Martínez, “Creativo”.

El factor climático

Además de los problemas con el césped, Cortizo describió el Estadio BBVA como un “horno”. El intenso calor que se acumula en el recinto afecta significativamente el rendimiento de los jugadores, causando fatiga extrema y deshidratación. Esta situación contrasta marcadamente con otros estadios como el Universitario de Tigres, que Cortizo describe como un recinto frío.

Comparaciones y expectativas

A pesar de ser jugador del Monterrey, Cortizo no dudó en elogiar el campo del Estadio Universitario, hogar del rival acérrimo Tigres, señalando que las condiciones del césped allí son superiores. Esta comparación directa pone de manifiesto la necesidad urgente de mejoras en el Estadio BBVA.