ATIZAPÁN.- El Cortijo “Los Ibelles” vivió un lleno absoluto durante la celebración del Festival Taurino del Recuerdo, evento que reunió a figuras de distintas épocas del toreo mexicano. Entre los momentos más destacados de la jornada, Sebastián Ibelles firmó una actuación sólida.

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Ibelles, con un ejemplar de Arroyo Zarco, mostró temple y gusto en una faena que fue creciendo a base de insistencia y buen trazo. Desde el recibo hasta la estocada final, el joven torero dejó claro por qué es una de las realidades emergentes del toreo nacional, conectando con una afición que respondió con fuerza y reconocimiento.

Cartel de Lujo y Cruce Generacional

El festival, en el que también actuaron Guillermo Montero, Alfredo Gómez “El Brillante”, Paco Dóddoli, Manolo Mejía y el becerrista Salvador Santoyo, representó un cruce generacional donde la tradición se vio honrada y el futuro, bien representado.

Los novillos, de Marrón, De Haces y Arroyo Zarco, ofrecieron distintas exigencias, permitiendo momentos de inspiración y entrega por parte de los espadas. En ese contexto, Sebastián Ibelles fue uno de los nombres que más caló, dejando huella en una tarde que rindió homenaje a la memoria y a la vigencia de la fiesta brava en México.