A un año de su creación, la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti) se posicionó como una de las dependencias estratégicas del gobierno federal al conducir los proyectos clave de la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, con un enfoque orientado al desarrollo nacional, la soberanía tecnológica y el bienestar social.

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Bajo la conducción de la secretaria Rosaura Ruiz Gutiérrez, la Secihti articuló capacidades de universidades públicas, Centros Públicos de Investigación y dependencias del Estado para impulsar una agenda científica alineada con las prioridades del actual gobierno, en la que convergen innovación tecnológica, política industrial, educación superior y fortalecimiento del conocimiento público.

Entre los proyectos emblemáticos destaca Coatlicue, la supercomputadora pública mexicana, desarrollada en coordinación con la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, que colocará a México a la vanguardia regional en supercómputo y permitirá atender retos estratégicos como el cambio climático, la planeación energética, la salud, la seguridad y el análisis de grandes volúmenes de datos para políticas públicas.

Coatlicue contará con una inversión pública de seis mil millones de pesos y su desarrollo abarcará un periodo de veinticuatro meses a partir de 2026, desde la planeación hasta su entrada en operación, de manera paralela a la instalación del Centro Mexicano de Supercómputo en el Centro de Supercómputo de Barcelona, con el objetivo de fortalecer la formación de especialistas en cómputo avanzado.

Otro eje central es Olinia, proyecto nacional de electromovilidad que avanza como una iniciativa de diseño propio, con la participación de científicas y científicos del Instituto Politécnico Nacional, el Tecnológico Nacional de México, la Universidad Nacional Autónoma de México y Centros Públicos de Investigación, con avances en arquitectura vehicular, módulos de baterías y definición estratégica del modelo tecnológico.

En el ámbito de los semiconductores, la Secihti coordina Kutsari, el Centro Nacional de Diseño de Semiconductores, orientado a fortalecer la cadena de valor del silicio y el desarrollo de capacidades nacionales en diseño de chips, con sedes en Puebla, Jalisco y Sonora, y la participación del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica, el Cinvestav, la UNAM y el IPN.

En educación superior, la dependencia asumió la administración y expansión de la Universidad Nacional Rosario Castellanos, que hoy atiende a más de 76 mil estudiantes en modalidades presencial y a distancia, con presencia en nueve entidades, como parte de la meta presidencial de ampliar de manera sustantiva el acceso a la universidad pública.

En paralelo, la Secihti fortaleció el sistema científico nacional mediante el incremento de becas de posgrado en México y en el extranjero, la ampliación del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores, la actualización del Sistema Nacional de Posgrados y el respaldo a más de mil ochocientos proyectos de investigación, consolidándose como una de las columnas vertebrales de la administración de Claudia Sheinbaum.