El Senado de la República inició este jueves con un retraso de dos horas la sesión a la que había convocado, mientras los senadores esperaban “un documento” que podría ser la renuncia del fiscal General, Alejandro Gertz Manero. Aunque la posibilidad circulaba en los pasillos, los coordinadores del PAN y Movimiento Ciudadano, Ricardo Anaya Cortés y Clemente Castañeda, afirmaron que no tenían información sobre el contenido de dicho documento. Al mismo tiempo, la senadora Claudia Anaya Mota advirtió que todo el procedimiento estaba lleno de irregularidades.

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De acuerdo con senadores consultados, la carta enviada por Adán Augusto López Hernández, presidente de la Jucopo, a la presidenta Claudia Sheinbaum, señala que Gertz Manero no ha cumplido con sus obligaciones de informar y que se le dio un plazo hasta las 14:00 horas para presentar su renuncia. La existencia de esa comunicación aumentó la tensión en la Cámara alta y reforzó la sospecha de que el retraso estaba directamente relacionado con la situación del fiscal.

Anaya Mota explicó que la Mesa Directiva no se reunió para aprobar el orden del día, como marca el reglamento, y que el documento circulado no cuenta con esa validación.

Relató que fue por su insistencia en conocer la temática de la convocatoria que se envió esa orden del día, aunque sin la aprobación formal de la Mesa. Consideró que este manejo parecía un intento de ganar tiempo mientras Morena resolvía asuntos internos relacionados con la Fiscalía. Señaló que lo ocurrido parecía “una pelota de playa para distraernos” y que todo apuntaba a un tema vinculado al fiscal.

La senadora también puso en duda que hubiera llegado una renuncia formal de Gertz Manero, y recordó que, como integrante de la Mesa Directiva, nunca fue informada por la presidenta Laura Itzel Castillo sobre la recepción de algún documento.

Subrayó que la presidenta de la Mesa no tiene facultades para reservarse comunicaciones y que cualquier documento debe notificarse al pleno conforme marca el procedimiento. “Aquí no es su casa para que hagan lo que quieran los de Morena”, comentó.

Cuestionada sobre posible presión política para forzar la salida del fiscal, Anaya Mota sostuvo que, de ser así, ello confirmaría que “ya no hay autónomo que resista a este hiperpresidencialismo”. Afirmó que se observa un proceso donde Morena desmantela el Estado de derecho, la República, la división de poderes y los organismos autónomos.

Sobre una eventual remoción, recordó que la Constitución permite que la presidenta solicite la separación del fiscal solo si argumenta una causa grave, y que el Senado debe analizarla. Hasta ahora, no se ha presentado ninguna solicitud formal ante los órganos legislativos.

Advirtió que, si existe un documento relacionado con el fiscal, estaría resguardado únicamente por la bancada de Morena, lo cual consideró indebido y contrario al reglamento, pues todos los senadores tienen derecho a conocer cualquier comunicación que llegue a la Cámara.

En redes, la legisladora escribió: “Morena quiere tumbar al Fiscal General de la República. Por las buenas o por las malas…”