La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo consideró una medida “totalmente exagerada” la decisión de cerrar nuevamente la frontera por parte de Estados Unidos, tras la detección de un caso de gusano barrenador del ganado en Veracruz: “Desde nuestro punto de vista, fue una decisión totalmente exagerada el volver a cerrar la frontera”, afirmó.

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Detalló que desde el primer momento trabajaron de manera coordinada los equipos técnicos de México y de Estados Unidos, siguiendo protocolos científicos estrictos para determinar si existe o no una situación de alerta.
En conferencia de prensa subrayó que el brote está siendo atendido con base en conocimiento técnico y medidas prácticas comprobadas.

Aclaró que, ante la detección del caso, se activaron de inmediato los protocolos de contención, incluyendo la liberación de moscas estériles, y que el contacto entre autoridades continúa para garantizar que la frontera se reabra lo antes posible.

Ante el reciente brote de gusano barrenador del ganado registrado en el municipio de Ixhuatlán de Madero, Veracruz, quedará completamente controlado en un plazo no mayor a dos semanas, informó Francisco Javier Calderón Elizalde, director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), durante la conferencia de prensa encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

“Al día de hoy no hemos tenido casos secundarios, por lo cual consideramos que se trata de una incursión. Estamos seguros de que en no más de dos semanas el caso ya estará inactivo”, señaló Calderón Elizalde.

Al señalar que la detección ocurrió el 8 de junio, y de inmediato se desplegó un equipo de 20 médicos veterinarios para atender el punto focal. Señaló que las acciones incluyeron la revisión directa de unidades de producción, atención de animales heridos, vigilancia activa y control de la movilización ganadera hacia el norte y sur del estado.

Además, dijo, se inició la liberación de moscas estériles como parte del protocolo biológico de contención.

El titular de SENASICA explicó que el país cuenta con un sistema de respuesta dividido en tres zonas: una zona de contención —ubicada en el sur-sureste del país, donde se tiene presencia conocida de la mosca—; una zona de amortiguamiento, con protocolos diferenciados para la atención inmediata de casos nuevos; y una zona libre, con vigilancia preventiva.

“Desde mayo de este año el número de animales afectados ha ido a la baja. Llegamos a tener 481 casos activos; hoy tenemos alrededor de 392. Este descenso marca un punto de quiebre positivo y refleja que nuestra estrategia está funcionando”, indicó Calderón Elizalde.

Durante su intervención, el funcionario recordó que México mantiene activos estos protocolos desde noviembre de 2021, cuando se activó un dispositivo nacional de emergencia ante el riesgo de dispersión del gusano barrenador del ganado.

Explicó que esta plaga había permanecido confinada desde 2006 en el Tapón del Darién —en la frontera entre Panamá y Colombia— gracias a una barrera biológica basada en la liberación de moscas estériles. No obstante, a partir de 2022 comenzaron a recibirse reportes de dispersión y en julio de 2023 Panamá declaró el estado de emergencia.

Por ello, dijo que “México reforzó su infraestructura, capacitó a los productores e implementó medidas de detección oportuna. Enseñamos qué es el gusano, cómo se presenta, cómo se trata y, sobre todo, la importancia de notificar los casos para que podamos desplegar nuestras acciones de control”, detalló Calderón Elizalde.