Sobre temas económicos, específicamente acerca del control de la inflación, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció en su encuentro con la prensa en Palacio Nacional la firma de un acuerdo con las harineras de maíz y las asociaciones de tortillerías, “también en un acuerdo voluntario, para que no suba el precio del kilo de tortilla“.

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El objetivo de esta acción, explicó la mandataria federal, “es que haya menos intermediarios entre el que vende maíz y el que lo procesa, y que haya acuerdos directos entre el productor y el procesador para disminuir todo el intermediarismo, que muchas veces es el factor que eleva el precio de la tortilla“.

El acuerdo que se firmará este jueves “es muy importante“, subrayó Sheinbaum, “pues la tortilla es el principal alimento en nuestro país; además, con las Tiendas del Bienestar y Alimentación para el Bienestar se está diseñando un programa para las zonas más pobres del país, en particular ahí para que pueda haber una reducción del precio de la tortilla“.

El acuerdo, acotó, incluye la tortilla, tanto la que se compra en las tiendas de autoservicio como la que expenden las tortillerías.

El pasado 9 de junio, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que el precio promedio nacional era de 23.87 pesos. En Tlaxcala, la dependencia encontró el precio más bajo, con 19 pesos el kilo, y el más caro lo halló en La Paz, Baja California Sur, en 28 pesos.